Río de Janeiro, 13 may (EFE). Las autoridades brasileñas pararán en la frontera a los hinchas violentos de otros países que traten de viajar al país con motivo del Mundial de fútbol, que comienza dentro de 30 días, informó hoy el Ministerio de Deportes.

Las policías de otros países, entre ellas las de Argentina e Inglaterra, están enviando listas con nombres de hinchas «con histórico de violencia» y antecedentes criminales, informó el Ministerio en un comunicado enviado a Efe.

Los aficionados que aparezcan en esas listas serán parados en la frontera, impedidos de entrar en Brasil y devueltos a sus respectivos países, según el comunicado.

Los barras bravas que consigan superar ese filtro y entren en Brasil, podrán ser identificados por los policías de sus respectivos países que estén destinados en Brasil.

El ministro del Deporte, Aldo Rebelo, afirmó este lunes en una entrevista al grupo de comunicación Estado, que si los barras bravas argentinos consiguen entrar en el país «serán identificados y devueltos» a su país.

Cada uno de los 32 países que jugarán el Mundial enviará siete policías que participarán directamente en el dispositivo de seguridad del Mundial y estarán destacados en el Centro de Cooperación Policial Internacional (CCPI) en Brasilia.

Otros equipos de policías, debidamente uniformados, acompañarán los desplazamientos de sus respectivas selecciones y estarán presentes en los lugares de concentración de los hinchas, con el objetivo de identificar a los que tengan antecedentes criminales y evitar posibles episodios violentos.

Descontentos. Hasta dentro de las estructuras del Gobierno de Amazonas hay desconfianza sobre lo que será el día después del Mundial. El secretario de Cultura del estado, Roberio Braga, declaró que «la ciudad de Manaos deja mucho a desear» frente al Mundial.