La estelar libero de la Selección Nacional de Voleibol, Brenda Castillo, reapareció ayer en el Pabellón de Voleibol donde presenció el juego de semifinal entre Cristo Rey y Caribñeas y de inmediato alborotó al publico.
HOY, al conversar con ella, afirmó que la experiencia de ser madre es algo que no tiene explicación.
“Poderla cargar en mis brazos, por primera vez, fue algo mágico”, precisó. Afirmó que no sabe cuando regresará al voleibol, trabajo que ama, pero ahora está dedicada a su familia. Dijo que la niña que apenas tiene un mes de nacida se llama Breanna Juliette. Expuso que fue un parto prematuro, pero que tanto ella como la niña, ya están sanas y fuera de peligro. “Este martes me la entregan y estoy esperando ese momento con ansias”, sostuvo Castillo. Agradeció al doctor Milcíades Albert y su equipo por todas las atenciones que les brindaron.