Más de diez toneladas de desechos sólidos son retiradas a diario de una cañada de 15 kilómetros de largo que voluntarios recorren desde el kilómetro nueve y medio de la Autopista Duarte al río Isabela, en una jornada para prevenir inundaciones en la próxima temporada de lluvia.
Organizaciones que conforman la Fundación de Desarrollo y Medio Ambiente de La Puya (Fundemapu) se instalaron en puntos estratégicos de la cañada El Caliche con el respaldo del Ayuntamiento del Distrito Nacional (ADN).
Mario Luna, presidente de la fundación, observó, sin embargo, que se enfrentan con escombros depositados en la cañada por empresas constructoras de sectores como Arroyo Hondo, Los Angeles y Los Ríos.
También con personas que destruyen el piso de la fuente de agua construida a principios de los años 70 para colectar las varillas y venderlas por libra, y con animales muertos, entre perros y cerdos.
La jornada comenzó el lunes en el barrio El Caliche, fue continuada ayer en los sectores Los Angeles y La Puya, en Arroyo Hondo, lugares desde los cuales cientos de familias son reubicadas por inundaciones cada vez que se producen fuertes aguaceros.
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El pago
Las brigadas pagadas por la fundación con los 20 dólares que recibe del ADN por cada tonelada de basura que retiran y llevan al puesto de transferencia, en Villas Agrícolas, habían saneado ayer unos mil metros de cañada.
La cloaca
La fuente de agua que atraviesa sectores de Santo Domingo estaba convertida en inmensos vertederos, a pesar de que los camiones recolectores de basura pasan diariamente por las calles laterales.
Agreden a la Isabela
Mediante el saneamiento de la cañada El Caliche, los miembros de la fundación alivian la carga de contaminación que pesa sobre el río Isabela.