Brisas

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José Manuel Hernández Peguero ha tenido la gentileza de enviarme las memorias de  su gestión como pasado Procurador  Fiscal del Distrito Nacional.

Bajo el título  “Una gestión de cambios”, el documento  recoge importantes logros que, sin lugar a dudas, colocan a esa institución en un sitial privilegiado dentro del aparato judicial dominicano.

Entre los aportes más importantes están la instalación de catorce fiscalías barriales en populosas  y estratégicas zonas, como Villa Juana, Villa Consuelo, Villas Agrícolas, María Auxiliadora, Los Ríos, Los Girasoles, Los Guandules, Gualey, Ensanche Quisqueya, Cristo Rey, Zona Colonial, la carretera Sánchez y Capotillo. Asimismo, se puso especial interés  en  las mujeres víctimas de la violencia,  a quienes se les brinda atención multidisciplinaria para lograr su rehabilitación integral. En ese mismo tenor se trabaja con los maltratadores  a fin de que mejoren esa conducta tan peligrosa,  que  causa la muerte de unas 100 mujeres al año  en nuestro país. De acuerdo con las estadísticas que ofrecen estas memorias, en el  año 2007 en el Distrito Nacional  esos casos  se redujeron en un 55% con relación al 2006.

Algo muy alentador es la implementación de estrategias preventivas  y “solucionadoras” de conflictos, a través de ocho  unidades de mediación que trabajan en coordinación con los dirigentes comunitarios. Hernández Peguero señala: “Hicimos énfasis en la especialización y capacitación de fiscales en la investigación de los actos ilícitos penales, además del establecimiento de espacios físicos adecuados y dotación de equipos tecnológicos para lograr sanciones en plazos cada vez más breves”. Más adelante abundaremos en otros otros logros de esa gestión.

Anidamos la esperanza de que,  como es el deseo del pasado fiscal, se le dé continuidad a esas conquistas, y  estamos seguros de que él está presto a brindar su  cooperación para que así sea.

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