Creo que hace falta darle difusión a las disposiciones legales que rigen el uso de nuestros símbolos patrios, e incluso actualizarlas si es necesario, porque muchas veces se cae en la irreverencia.
Hace algunas semanas murió una persona muy meritoria de mi comunidad y en su ataúd colocaron la Bandera. Si se toma en cuenta la repulsa colectiva que ha causado el que eso mismo se ha hecho con reconocidos delincuentes que han fallecido, uno diría que lo primero está correcto.
La Ley 360, que data de la Era de Trujillo, ha sido objeto de algunas modificaciones, y sólo se habla de cómo debe colocarse la Bandera Nacional en el féretro de distinguidas personalidades civiles y militares y queda sujeto a la libre interpretación de la gente a quién consideran como distinguidas personalidades.
Pero también vemos banderas confeccionadas de cualquier manera: con colores distorsionados y con dimensiones que no se corresponden de manera proporcional a las oficiales, incluso las hacen de manera vertical, cuando debe ser horizontal y le colocan el escudo tanto del lado revés como del derecho.
Tampoco estoy segura de si en los casos de duelo nuestra enseña se iza correctamente, elevándola primero hasta el tope y luego llevarla a media asta hacer lo mismo para bajarla. Y ahora una pregunta: ¿cuántos sabemos cómo se dobla una bandera?
Las disposiciones vigentes prohíben el uso de banderas en mal estado y eso se ve hasta en recintos militares y policiales. He visto banderas que ondean hechas trizas y otras a las que no les cabe más sucio. Algunos organismos oficiales, como la Secretaría de Interior y Policía y la de Educación, deberían abocarse a una campaña para que hagamos conciencia acerca del uso correcto de nuestros símbolos patrios y que en los planteles escolares se haga más énfasis en este tema.