ROSA FRANCIA ESQUEA
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El pasado miércoles fue un día memorable porque pude disfrutar de la celebración de los 80 años de que fuera fundada la Sociedad Cultural Renovación, de puerto Plata.
Fue un acto hermoso, que tuvo como escenario el Club Andrés Brugal Montaner, todo estaba exquisitamente preparado: una música de cámara nos dio la bienvenida; las sillas, todas vestidas de blanco, estaban engalanadas con lazos rojos y azules, los colores de nuestra bandera.
Los invitados, la mayoría de ellos vinculados al mundo de las letras, no dejaban de expresar su admiración por el trabajo realizado por una institución cultural provinciana, pero que ya extiende su proyección a todo el ámbito dominicano con la apertura a nivel nacional de concurso Por Nuestro País Primero. Más de un centenar de niños y jóvenes se mostraban alegres porque fueron premiados en los diferentes renglones y categorías de ese certamen, quizás el más antiguo que existe aquí. También nos encontrábamos los autores de los trabajos premiados a nivel nacional, Arsenio Díaz, doblemente galardonado en Poesía y Ensayo y la autora de esta columna, en Literatura Infantil.
El equipo dirigente de esa entidad lucía feliz con sobradas razones y es que son 80 años de permanente renuevo y eso quiere decir que en vez de envejecer con el paso de los años es todo lo contrario: cada día hay mayores retos y compromisos. Este año la actividad tuvo como novedad que en vez de Brugal como empresa, los premios fueron patrocinados por la Fundación que lleva ese nombre; pienso que en esencia es lo mismo y que, incluso, así está más acorde con el propósito de ese concurso.
La Sociedad Cultural Renovación está haciendo un trabajo patriótico que es el de llevar educación y cultura a la gente, pero lo más importante es que mantiene un espacio abierto a la niñez y a la juventud.