NUEVA ORLEANS.  AP.  Un tapón ajustado firmemente está impidiendo que el petróleo se fugue al Golfo de México por primera vez en tres meses, indicó BP ayer. 

La victoria largamente aguardada por los residentes de la costa es el hito más significativo hasta la fecha en el esfuerzo de British Petroleum por controlar uno de los peores desastres ambientales en la historia de Estados Unidos.  Kent Wells, un vicepresidente de BP PLC, dijo en una conferencia de prensa que el petróleo dejó de salir al agua a las 2:25 de la tarde. 

Aunque no se trata de una solución permanente para tapar el pozo, el éxito de la maniobra fue una noticia recibida con beneplácito.  “Estoy muy complacido de que no se está fugando petróleo a retener el petróleo sin ocasionar una nueva fuga en el pozo. Ingenieros monitorearán lecturas de presión hasta por 48 horas antes de reabrir la tapa mientras deciden qué hacer.  Aunque no es un arreglo permanente, ha sido la única solución que ha funcionado para detener el flujo de crudo desde abril. BP está perforando dos pozos de alivio con el fin de poder inyectar barro y cemento al pozo con la esperanza de taponarlo definitivamente a mediados de agosto.  La empresa ha tenido problemas para contener la fuga y hasta ahora sólo ha logrado disminuir el flujo, no detenerlo. La compañía retiró una tapa vieja que tenía filtración e instaló una nueva el lunes.