JERUSALEN. AP. Cohetes disparados desde el Líbano cayeron ayer en el norte de Israel, sin dejar lesionados pero provocando una represalia israelí que ha causado un nuevo brote de violencia entre ambos países.

Los vecinos del poblado israelí de Kiryat Shmona despertaron con el ruido de dos fuertes explosiones. Micky Rosenfeld, portavoz de la policía de Israel, dijo que los cohetes no provocaron lesiones ni daños. Poco después, las fuerzas armadas de Israel informaron que habían respondido con fuego de artillería dirigido al lugar desde donde se dispararon los cohetes.

Por su parte, la agencia oficial de noticias libanesa dijo que la zona fronteriza fue objeto de fuego de artillería después que los cohetes hicieron impacto en Israel. La agencia dijo que más de 20 proyectiles de artillería cayeron en la zona montañosa alrededor de la zona de Rachaya.

El ministro de Defensa de Israel, Moshe Yaalon dijo que su país “no tolerará” tales ataques y responsabilizó al gobierno y ejército del Líbano por cualquier fuego enemigo desde su territorio.

“No permitiremos que incidentes como el de esta mañana se queden sin respuesta”, dijo en un comunicado. “No recomiendo a nadie que ponga a prueba nuestra paciencia y determinación de proteger la seguridad del pueblo de Israel”. Nadie se ha atribuido hasta ahora la responsabilidad del ataque.