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Para Casa Brugal el bienestar de las familias de todos sus colaboradores es una prioridad. Esa es la razón por la que beneficia a sus hijos con un plan de becas que les permite el acceso a una educación de calidad. Para motivar los buenos resultados académicos, la empresa reconoce a los mejores.
En el acto de entrega del reconocimiento a estudiantes meritorios 2016-2017, Augusto Ramírez, presidente de la empresa, recordó que Casa Brugal ha asumido un nuevo liderazgo, inspirado en el poder que hoy tienen las empresas para hacer el bien y contribuir a transformar la sociedad.
El ejecutivo de Casa Brugal, uno de los mayores contribuyentes del Estado y el productor de una marca país que representa por el mundo la identidad de los dominicanos, advirtió que República Dominicana solo logrará el bienestar que se merece su gente, si las generaciones que construirán el futuro reciben una educación de calidad mundial.
Según Ramírez, las iniciativas solidarias de Casa Brugal son parte del accionar cotidiano de la empresa. “Esa es la razón por la que uno de los pilares de nuestra visión es Aportando Más, a través del cual dejamos nuestra huella social en República Dominicana”, aseguró.
“El Plan Escolar de Casa Brugal ha logrado beneficiar, durante más de 30 años de implementación, a un promedio anual de 700 hijos de colaboradores. Hoy reconocemos a los que mejores resultados académicos han tenido. Nuestra manera de aportar cada vez más es contribuir al desarrollo; la de ellos, estudiar”, dijo Augusto Ramírez.
Aportando Más abarca todas las contribuciones de Casa Brugal al desarrollo de República Dominicana, incluyendo el accionar de la Fundación Brugal, los Premios Brugal Cree en su Gente, así como la capacitación y el crecimiento de sus colaboradores y la cobertura de la educación de sus hijos.
“Estamos contribuyendo cada vez más con nuestros colaboradores, el país, los consumidores y el entorno. Creer en la gente es creer en su futuro y contribuir, día a día, a que sea el que merecen. Por eso trabajamos sin descanso para hacer el bien… haciéndolo bien”, concluyó Augusto Ramírez.
