WASHINGTON. AFP. Estados Unidos, «utilizando una definición basada en el sentido común, está en recesión», afirmó el multimillonario Warren Buffett durante una entrevista con la televisión de información financiera CNBC el domingo.

 «Veo las cifras de nuestra actividad comercial en detalle y veo que el poder adquisitivo declina, veo las cifras de desempleo aumentar, aunque permanecen bajas», explicó para argumentar su aseveración.

 «Creo que está claro» cuál es la situación económica, «lo que no lo está tanto es hasta dónde va a llegar», añadió Buffett, cuyas opiniones son escuchadas con atención por la comunidad financiera y que es conocido como «el oráculo de Omaha», en referencia a la ciudad de Nebraska (centro) donde nació hace 77 años.

La actividad  en el sector manufacturero en Estados Unidos se contrajo en febrero y se percibió también un descenso en el nivel de empleo, según datos divulgados hoy por el Instituto de Gestión de Suministros (ISM, en inglés).

El índice de actividad en ese sector se situó en el mes pasado en 48,3 puntos, comparado con los 50,7 puntos del mes anterior.

Un índice por debajo de 50 puntos refleja una contracción de la actividad en el sector y por encima de ese nivel, un crecimiento.

Los economistas preveían que el índice de actividad se situase en torno a 48 puntos.

La mayoría de los componentes que se toman en cuenta para elaborar ese índice mostraron un empeoramiento en febrero respecto del mes anterior, mientras que los precios que pagaron los empresarios para desarrollar su actividad retrocedieron ligeramente aunque siguen en niveles elevados. El índice de nuevos pedidos recibidos por las empresas descendió a 49,1 puntos, frente a los 49,5 puntos de enero, y el de producción se situó en febrero en 50,7 puntos, comparado con los 55,2 puntos del mes anterior. El índice de empleo se situó en 46 puntos, desde los 47,1 puntos de enero, y el relativo a los precios se situó en 75,5 puntos, comparado con los 76 puntos de enero. 

Se reduce gasto en construcción

El gasto en construcción  en Estados Unidos se redujo un 1,7 por ciento en enero, la mayor caída en 14 años, ante la crisis del sector inmobiliario y la ralentización del conjunto de la actividad económica en el país.

Los datos publicados hoy por el Departamento de Comercio muestran que la caída afectó a distintos sectores, aunque fue más acusada en el área de viviendas residenciales.

Las últimas cifras reflejan una caída en el gasto en construcción de hoteles, autopistas y varios proyectos locales y estatales.

El indicador fue peor de lo que esperaba el consenso de economistas, que habían pronosticado una caída más pequeña, de en torno al 0,8 por ciento.

Por lo demás, la contracción del 1,7 por ciento de enero llega tras una caída del 1,3 en diciembre y fue el peor registro desde enero de 1994, cuando el gasto en construcción se redujo un 3,6 por ciento.