PUERTO PRINCIPE (AP) — Cada unidad que conforma el contingente de 7,800 miembros de las fuerzas de paz de las Naciones Unidas ha sido advertida contra la mala conducta de sus elementos, luego de un escándalo de abuso sexual surgido el mes pasado con soldados de Sri Lanka, dijo el principal representante del organismo en Haití.

 El enviado en jefe Hedi Annabi dijo el miércoles en una amplia entrevista con The Associated Press que las autoridades se mantienen atentas a la conducta de los miembros de las fuerzas de paz luego del escándalo que causó el empleo de varias prostitutas locales, algunas menores de edad, tras el cual fueron retirados al menos 108 soldados de Sri Lanka.  “El comandante de la fuerza ha visitado cada una de las unidades para advertirles contra cualquier posible falta de conducta”, dijo Annabi, quien tomó oficialmente el control de las operaciones de paz en septiembre. “Estamos aquí para servir a nuestros amigos haitianos y no crearles problemas”.

 Los soldados retirados, casi una décima parte del batallón de Sri Lanka en Haití, enfrentan ahora procesos legales y cortes marciales en su país, dijo Annabi. Tres oficiales fueron enviados también de regreso por no haber ejercido su liderazgo y las autoridades del país han reemplazado al comandante del batallón. 

Los señalamientos causaron ira en Haití, país de 8,7 millones de habitantes donde la gente tiene una relación difícil con las fuerzas enviadas en el 2004 para ponerle fin al caos posterior al derrocamiento del ex presidente Jean-Bertrand Aristide. 

Aunque la fuerza, conocida por el acrónimo francés MINUSTAH, ha sido reconocida por traer seguridad al país, muchos están incómodos con la presencia de soldados extranjeros fuertemente armados y consideran que ahora la atención de la comunidad internacional debe de enfocarse más en cuestiones de desarrollo.