BAGDAD (AP) — Centenares de soldados iraquíes y estadounidenses acordonaron ayer miércoles varias zonas del suburbio capitalino de Ciudad Sadr en busca de los cinco civiles británicos secuestrados la víspera en el Ministerio de Hacienda, dijeron los lugareños y la policía.

 Los funcionarios de la embajada británica dialogaron el miércoles con las autoridades iraquíes para analizar la situación, dijo la cancillería en Londres. La comisión británica de crisis llamada COBRA se reunirá igualmente por segundo día consecutivo.

 Los cinco fueron secuestrados el martes del Ministerio de Hacienda por unos 40 hombres armados que vestían uniformes de policías y que llegaron en un convoy de 19 vehículos pintados de blanco, en los que huyeron hacia Ciudad Sadr, según los funcionarios de los ministerio del Interior y Hacienda de Irak.  Un funcionario iraquí dijo que se sospecha que el Ejército de el-Majdí, una milicia chií, perpetró el ataque.

 La secretaria británica de Relaciones Exteriores Margaret Beckett dijo que las autoridades hacen todo lo posible para lograr el “pronto y seguro retorno” de los cinco británicos secuestrados en Irak.

  “Es un momento muy tenso para todos los afectados”, dijo la canciller al llegar a la ciudad alemana de Postdam para asistir a la reunión del Grupo de los Ocho.  “No ayuda en estos momentos conjeturar sobre la suerte que podrían haber corrido”, agregó Beckett.

 “Trabajamos estrechamente con las autoridades iraquíes para establecer los hechos y hacemos todo lo posible para obtener su pronto y seguro retorno”, insistió.  Poco después del secuestro, las fuerzas iraquíes movilizaron un batallón especial integrado por policías y soldados de Irak para localizar a los secuestrados, dijo el brigadier general Qassim al Musawi, vocero del ejército.

13 muertos

 Al menos 13 personas murieron ayer  en Irak en diversos episodios violentos, cinco de ellas al caer obuses en el antiguo bastión rebelde de Faluya, al oeste de Bagdad, indicaron fuentes del ejército estadounidense y de la seguridad iraquí. Varios obuses de mortero explotaron en el centro de la ciudad de Faluya.