POR MARIO MÉNDEZ
El pasado jueves fue celebrado un encuentro entre empresarios dominicanos y ejecutivos del Banco Europeo de Inversiones (BEI), en el cual se hicieron recomendaciones para que los recursos de esa entidad puedan llegar a un mayor número de empresas, a tasas competitivas y que el proceso de tramitación de los préstamos sea más ágil.

El encuentro fue realizado en el Centro de Exportaciones e Inversiones de la República Dominicana (CEI-RD). Participaron por el BEI, su director general, Anthony Whitehouse, y la Encargada Regional del Caribe, señora Guadalupe de la Mata.

En el encuentro se ponderó que el BEI constituye una respuesta a las necesidad que tienen las empresas dominicanas de financiamiento a tasas de interés competitivas y a largo plazo.

Se explicó que con este tipo de financiamiento el país se puede embarcar en proyectos de inversión a largo plazo y facilitar que muchas empresas puedan hacer su reconversión, para que puedan competir en el marco de los tratados de libre comercio firmados por la República Dominicana.

Sin embargo, en el encuentro se señalaron algunos factores que están dificultando que los financiamientos del BEI cumplan con esos objetivos.

Entre los problemas presentados, se señaló el de que el monto mínimo para los préstamos indirectos, a través de la banca local, es muy alto: de un millón de dólares.

Con ese monto mínimo, muchas pequeñas y medianas no podrían tener acceso a ese financiamiento.

Se sugirió que el monto mínimo fue bajado a 300 mil dólares, lo cual ha sido aprobado por el BEI.

También hubo empresarios que plantearon que los intereses del BEI están en menos de 5 por ciento anual, pero que cuando la banca local toma esos préstamos, suben a más de 10 por ciento.

Se explicó que para que esos préstamos funcionen debe establecerse un margen limitado de intermediación a la banca.

De lo contrario, no serían préstamos competitivos a nivel internacional, se explicó.

Para préstamos con inversiones importantes de capital y largo plazo, debería hablarse de préstamos a tasas de 6 a 7 por ciento, para que el país sea competitivo, se planteó.

No obstante, se reconoció que la banca dominicana está limitada por las regulaciones, por lo cual se debería conciliar el objetivo de tasas de interés competitivas con el cumplimiento de esas regulaciones.

Otra dificultad que se planteó es que el período de manejo de esos préstamos para su aprobación y desembolso es muy largo, de hasta nueve meses.

Se solicitó que el BEI estableciera una oficina directa en Santo Domingo, para evitar que el proceso de tramitación de los préstamos sea tan largo.