POR RICARDO RODRIGUEZ R.
SANTIAGO.- Agentes policiales persiguen a un obrero que ayer, creyendo que su mujer y sus seis hijos estaban durmiendo en la casa, la incendió y afortunadamente estos la habían desocupado minutos antes. El general Raudo Ramírez Comas, comandante policial de esta plaza, dijo esperar que Narciso Bencosme Román sea apresado en el menor tiempo posible, a fin de remitirlo a la justicia para que responda por el hecho.

A las 4:00 de la madrugada de ayer, Bencosme Román regresó a la casa número 56, de la calle Primera del sector La Mosca, de donde minutos antes había salido a comprar gasolina para cometer el hecho, tras una fuerte discusión con su mujer, Eva Tavárez.

La mujer explicó que cuando Bencosme Román se marchaba, tras la discusión,  le advirtió que iba a comprar gasolina para incendiar la vivienda con ella y los seis hijos dentro.  Tavárez manifestó que como le dio crédito a la amenaza, optó por refugiarse donde una vecina con sus hijos, cuyas edades oscilan entre 1 y 16 años.

Cuando Bencosme Román retornó, creyendo que su mujer y los seis niños estaban aún dentro de la casa, vociferó que cuando terminara de contar hasta cinco, procedería a incendiarla, lo que cumplió inmediatamente, tras lo cual se dio a la fuga.

Argentina Perdomo, vecina  de Bencosme Román, dijo que éste fue a su casa y la despertó para decirle que había incendiado la casa con su familia adentro y que al mirar hacia el lugar, no vio humo, por lo que no le creyó.

“Pero poco tiempo después volvió y me dijo lo mismo y cuando dirigí la vista hacia la casa, vi que las llamas la consumían, por lo que desperté a los vecinos y comenzamos a apagar el fuego, optando él por desaparecer del lugar”, contó.

En la humilde vivienda, Eva vivía con sus hijos Jean Carlos, Melfri, Raisa, Jefrey, Yudelka y Marielis, de los cuales cinco son hijos del obrero.

Ahora todos se han visto en la necesidad de refugiarse en casas de vecinos, en vista de que la de ellos quedó prácticamente inservible, al igual que las pertenencias que había en su interior. La mujer contó que con frecuencia era golpeada por Bencosme Román cuando llegaba a la casa y que incluso hace algunos meses le provocó una herida en el muslo izquierdo con un arma blanca “y también en esa oportunidad estaba bajo los efectos de las drogas”. El fuego no se extendió hasta las viviendas vecinas, en vista de que unidades del cuerpo de bomberos llegaron a tiempo para evitarlo.