WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, anunció el lunes la creación de una comisión de investigación independiente sobre el desempeño de los servicios de inteligencia antes de la guerra de Irak, tras el fracaso de los inspectores en encontrar armas de destrucción masiva (ADM) en ese país.
De igual manera el gobierno británico admitió ayer que existen interrogantes «legítimos» sobre las armas de destrucción masiva de Irak y parece inclinado a ordenar una investigación independiente.
«Creo una comisión investigadora independiente formada por representantes de los dos partidos (Republicano y Demócrata) para analizar dónde estamos, y lo que podemos hacer para luchar mejor contra el terrorismo», declaró Bush a periodistas tras una reunión de su gobierno en la Casa Blanca.
Según altos funcionarios estadounidenses que se mantuvieron en el anonimato, la comisión investigadora estará integrada por nueve miembros y deberá concluir sus trabajos en 2005, es decir después de la elección presidencial del 2 de noviembre, a la que se presenta el republicano Bush por un segundo mandato de cuatro años.
«En primer lugar quiero conocer todos los hechos. Sabemos que Saddam Hussein tenía la intención y la capacidad de provocar grandes daños. Era un peligro. No era solamente un peligro para el mundo libre, sino también para su propio pueblo», afirmó Bush. «Lo que no sabemos aún es (la diferencia) entre lo que pensábamos y lo que el grupo de inspección ha encontrado y queremos concentrarnos en eso. Pero también queremos tener en cuenta nuestra guerra contra la proliferación y las armas de destrucción masiva (ADM) en un contexto más amplio», destacó.
Estados Unidos desencadenó en marzo una guerra contra el dictador iraquí Saddam Hussein con el argumento de que poseía ADM y que con ellas amenazaba a Estados Unidos y a sus aliados.
[b]TAMBIÉN TONY BLAIR[/b]
El primer ministro, Tony Blair, tenía previsto este martes hacer una declaración ante la Cámara de los Comunes en la que podría anunciar la apertura de una indagación sobre los datos de espionaje con que justificó la invasión de Irak, algo a lo que se ha negado durante meses y que le exige la oposición en pleno.
«El primer ministro cree que es el momento adecuado para hacer frente a la pregunta de ‘dónde están las armas de destrucción masiva'», indicó hoy su portavoz.
Parece claro que Blair ordenará ahora una investigación sobre ese asunto y el retraso en su anuncio -en principio esperado para hoy mismo- podría deberse a que de momento no ha determinado quién la dirigirá, ni cómo será el proceso.
Desde antes de la guerra, en marzo de 2003, el jefe del Gobierno británico alertó del riesgo de las armas químicas y biológicas de Irak, especialmente por la posibilidad de que cayeran en manos de terroristas, y mostró seguridad en que los inspectores las descubrirían sobre el terreno, antes o después.
Pero, hace diez días, el ex jefe de los inspectores de armamento estadounidenses en Irak, David Kay, dimitió después de asegurar que no había armas de destrucción masiva en Irak antes de la guerra, una alegación que puede causar mucho daño a Tony Blair.
«Hay interrogantes legítimos sobre ‘dónde están las armas de destrucción masiva’ y su relación con los datos de inteligencia», reconoció ayer un portavoz de Downing Street.
Un influyente comité parlamentario concluyó ayer que el fracaso en encontrar las supuestas armas de Irak perjudica la credibilidad del Reino Unido y de EEUU en la guerra contra el terrorismo.
En un informe divulgado ayer sobre la lucha antiterrorista, el Comité de Exteriores de la Cámara de los Comunes señaló además que la acción militar en Irak puede hacer que los ataques terroristas contra intereses británicos sean más probables a corto plazo, otra de las afirmaciones negadas por Blair durante meses.
Las presiones a favor de esa investigación independiente en el Reino Unido se han reproducido en las últimas horas, una vez Bush confirmó que autorizará una indagación, con miembros demócratas y republicanos, sobre los datos de inteligencia con que justificó la invasión de Irak.
[b]BUSH RECIBE A KAY[/b]
El presidente estadounidense George W. Bush recibió este lunes en la Casa Blanca a David Kay, ex jefe del ISG, pero nada filtró de sus conversaciones.
Kay, que había solicitado la creación de una comisión investigadora independiente, abandonó la Casa Blanca hacia 13h00 locales (18h00 GMT) sin hacer declaraciones.
El domingo Kay afirmó en la cadena Fox que una investigación sobre los errores de los servicios de inteligencia en relación a la existencia de tales armas contribuiría a restablecer la credibilidad del país.
«No solamente es importante para el país, es importante para nuestra credibilidad como potencia mundial, para la relación con nuestros aliados», declaró Kay a la cadena Fox.
La decisión de crear una comisión investigadora independiente constituye un giro de Bush. La Casa Blanca expresó la semana pasada fuertes reservas a esa iniciativa.
Pero las crecientes presiones de legisladores y la proximidad de la elección presidencial lo empujaron a cambiar de opinión.
Con la postergación hasta 2005 del informe final de la comisión y al ampliar su cometido al conjunto de las cuestiones vinculadas con la proliferación de ADM y no solamente a las ADM iraquíes, Bush intenta evitar que la polémica aumente durante la campaña electoral.
Varios de sus potenciales adversarios demócratas denunciaron el hecho de que la administración Bush exageró el peligro que suponía Saddam Hussein para justificar la invasión de Irak.
John Kerry, el actual favorito en las primarias del Partido Demócrata para enfrentar a George W. Bush, había votado a favor de la resolución del Congreso estadounidense de fines de 2002 que autorizaba al presidente a atacar Irak. Afirmó luego que lo había hecho sobre la base de informaciones suministradas por la Casa Blanca sobre la presencia de ADM en Irak.
La composición de la comisión no fue precisada el lunes por la Casa Blanca. Los republicanos detentan la mayoría del Congreso.
La oposición demócrata del Senado insistió este lunes en la necesidad de que la comisión que investigue los informes de inteligencia estadounidense en Irak sea independiente.
«Pienso que es importante para nosotros que la comisión que investigará la cuestión de las armas de destrucción masiva en Irak sea verdaderamente independiente», declaró el jefe de la minoría demócrata en el Senado, Tom Daschle (Dakota del Sur).
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Francia, Dominique de Villepin, dijo este lunes en Santiago que la creación de una comisión independiente sobre la existencia de armas de destrucción masiva en Irak demuestra que Estados Unidos desea aclarar lo ocurrido en ese período.
«No me parece (que tenga que) comentar una decisión norteamericana, constato simplemente la voluntad de arrojar claridad sobre un período difícil para la comunidad internacional», dijo De Villepin en una rueda de prensa que ofreció tras reunirse con su homóloga chilena, Soledad Alvear.