Hoy 
NILES, EEUU.- El presidente estadounidense George W. Bush dijo ayer que espera que las tropas norteamericanas en Haití puedan transferir sus responsabilidades «relativamente rápido» a los cascos azules de la ONU.
«Nuestras tropas se quedarán ahí hasta que los cascos azules de la ONU vengan, lo que esperamos sea relativamente rápido», dijo Bush en una conferencia de prensa en el estado de Michigan (medio-oeste).
Haití ha estado ocupado por tropas internacionales desde el derrocamiento el pasado mes de febrero del presidente Jean Bertrand Aristide, quien salió del país.
La nueva misión de la ONU, aprobada por el Consejo de Seguridad la semana pasada, relevará a las tropas internacionales el próximo 1 de junio con un máximo de 6.700 soldados y 1.622 policías civiles.
[b]Forman consejo electoral[/b]
Un nuevo Consejo Electoral Provisorio en Haití, encargado de las elecciones de 2005, ya fue designado, y sus miembros jurarán sus cargos hoy o mañana, anunció el primer ministro haitiano, Gerard Latortue.
El gobierno de Puerto Príncipe ya publicó la composición de este Consejo, sin la participación de Familia Lavalas, el partido del ex presidente Jean-Bertrand Aristide, al no haber propuesto a candidato alguna antes del plazo establecido, el pasado 30 de abril.
Este Consejo tiene como objetivo preparar unas elecciones generales durante 2005 y está compuesto por representantes de los sectores políticos, las iglesias, el poder judicial, el sector privado y los organismos de derechos humanos.
De sus nueve miembros, uno quedó sin designar, y el gobierno no ha precisado en que plazo el sitio de Familia Lavalas podría ser ocupado, si este partido persiste en su negativa de enviar un representante.
«Dejamos vacío el noveno sitio porque queremos demostrar a los señores de Lavalas que los verdaderos demócratas somos nosotros», dijo Latortue durante una visita a Jacmel, sureste del país.
El Consejo está constituido según una formula prevista en los mecanismos de resolución de la crisis que fueron adoptados durante las consultas entre los actores políticos y la comunidad internacional que precedieron la caída del régimen de Aristide.
Los dirigentes de Familia Lavalas estimaron que no existen condiciones que permitan su participación en el proceso electoral.
El ex diputado Rudy Herivaux, responsable de comunicación del partido, afirmó ayer a la emisora privada Melodie FM que sus miembros son «perseguidos» en una ambiente de «represión».
