UBI RIVAS
El presidente George Bush jr. frustró la paz que alegaba propiciar en Palestina entre árabes y judíos cuando al concretizar su prometida visita al Estado de Israel, en conmemoración del 60 aniversario de su fundación, ofreció 63,830 globos a ese propósito.

Esos 63,830 globos representan el doble de 21,915 globos que fue el símbolo de todos los globos que soltaron los palestinos en alusión a los días en que inició lo que denominan “Nakba”, desastre, al fundarse el Estado de Israel el 14-05-1948.

Aconteció ese hecho trascendente en la historia del pueblo judío que padecía 1,215 años de dispersión o éxodo desde que en el año 60 e.c. las legiones romanas del emperador Tito destruyeron por segunda vez el templo de Salomón y sojuzgaron Judea o Palestina, cuando las Naciones Unidas, con el hegemonismo de Estados Unidos, como siempre, entonces con el protagonismo del presidente Harry Truman, de madre judía, obtuvo la resolución 171 del 29-11-47 que dividió el Mandato Británico en Palestina en dos estados, uno árabe y otro judío.

Esos 63,830 globos ofrecidos por Bush jr. a los palestinos, al mundo árabe y a todo el Islam  no solamente es un gesto imprudente, antidiplomático, cínico y asombroso como asombroso es el gobernante norteamericano más trágico de todos, sino chabacano, charlatanesco, risible y censurable.

Relega la paz en Palestina a 60 años más, anula, contradice, se burla el mismo de su casi perfecta Hoja de Ruta del 15-05-03, el más completo documento que de aplicarse, dispone de los mecanismos y sinergia clave para formalizar la paz permanente en Palestina que sin la proclamación de su Estado, no habrá paz nunca en la convulsa área.

Aguardaba llevar a imprenta el libro que he escrito sobre el milenario conflicto hasta concluir la Era Bush y ahora antes de su trágico final, el gobernante estadounidense me ofrece el chance de anticipar su publicación.