El cabello rizado en su forma natural, tendencia de los años 70, cuando se popularizó el “pajón” o afro, está retornando al mundo de la moda en mujeres de todas las edades.

Los fuertes problemas causados por el cambio climático podrían ser una de las razones de esta opción, que permite  disfrutar de mayor comodidad y alejarse por un tiempo del uso de los productos químicos.

Otra causa  sería darle un respiro al cabello que necesita descansar del fuerte calor recibido a través del blower, el secador y, por qué no, de la presión de los  rolos.

Estas alternativas podrían ser correctas; sin embargo, según la especialista en belleza Mirian Cabrera Olivo, también tienen  sus bemoles, porque el cabello sufre si no recibe los cuidados adecuados.

En ese sentido, la experta dice no podemos olvidar que el cabello requiere atenciones: necesita que se le suministren nutrientes a través de productos adecuados y además debe recibir un corte apropiado a cada tipo de cara, para que la mujer no luzca descuidada.

Expresa que hay cierto tipo de cabello que requiere de un producto texturizante que suavice las hebras y que en caso dejarse “apajonado” estos “hilillos” se quebrarían con facilidad al peinarse.

Las claves

1.  No utilizar el mismo producto

Variar las marcas de champú y acondicionador es muy favorable  para evitar que el cabello se acostumbre, porque llegará un momento en que perderá brillo y la fuerza del comienzo.

2.  No abusar de la plancha y el secador

Con este procedimiento el cabello queda más liso y menos rebelde, pero necesariamente  hay que darle un respiro,  para permitir que se recupere de absorber el excesivo calor de estos aparatos que pueden dañarlo.

La  protagonista

Mirian Cabrera Olivo

Peluquera y especialista en belleza   “Si decides llevar el cabello al natural es recomendable que sea atendido por una profesional que aplicará el producto adecuado. Si no  toma esta medida, cuando  acuda de nuevo a la peluquera y  utilice el secado con blower caliente el cabello sufrirá más daño”.