Ciento veinte familias socialmente excluidas por décadas y condenadas a vivir en la inmundicia y el abandono en la llamada cañada de Vuelta Larga, en Santiago, recibieron ayer apartamentos que construyó la alcaldía del municipio para sacarlas del muladar. En un hermoso y emotivo acto de inauguración, apoyado por diferentes sectores santiaguenses, el alcalde Gilberto Serulle entregó las viviendas.

Santiago. Cientos de familias excluidas por décadas y condenadas a vivir en la inmundicia y el abandono, en la cañada de Vuelta Larga, recibieron sus respectivos apartamentos de la alcaldía de Santiago, en un acto de inauguración respaldado por los diferentes sectores de esta ciudad.

El alcalde municipal, Gilberto Serulle, señaló la construcción de los apartamentos fue terminado en cien días con un costo aproximado de RD$150 millones, es un hecho sin precedentes ejecutado por un ayuntamiento, que dijo no dispone de recursos.

Esta acción innovadora tiene como peculiaridad la unificación de voluntades, por primera vez pueblo, empresariado y gobierno local se unen de la mano, presentando al país una solución a un problema, explicó el alcalde.

Insistió que la acción en Vuelta Larga, va a requerir de la sostenibilidad y complementación con otros proyectos, como la ampliación y mejora del sistema de tratamiento del agua residual de Santiago, la cual requiere de una inversión de RD$4,162 millones.

Este modelo debe ser observado y estudiado por los organismos nacionales y las agencias internacionales de cooperación y entidades de desarrollo, para que al conocerle puedan viabilizar la continuidad en la implementación de otras acciones en otros focos de pobreza, manifestó.

El acto de apertura, fue bautizado por una ligera llovizna, y dio inicio con la interpretación del Himno Nacional, a cargo de la Banda de Música Municipal, y las palabras de bienvenida de Rolando Sánchez, presidente de la Sala Capitular

Para bendecir la obra, Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio, dijo que las edificaciones representan la viva imagen de Jesús, quien vino al mundo a demostrarnos que el amor y la solidaridad al prójimo eran base de una vida cristiana.

La obra se construyó con la supervisión general del ingeniero Irving Vargas, secretario de Urbanismo del cabildo. El diseño estuvo a cargo de los ingenieros que edificaron los ocho edificios de 120 apartamentos, para igual número de familias y 20 locales comerciales.

La arquitecta Victoria Lora fue la encargada del paisajismo. Los edificios son de cuatro niveles y cada apartamento consta de sala, cocina, un baño, tres habitaciones y balcón.

Para organizar el proyecto y hacerlo más viable se construyeron dos puentes, área de recreación, un pequeño anfiteatro, dos parqueos y la calle que comunica a Vuelta Larga con otros barrios también fue asfaltada.

Una Vuelta larga. La cañada de Vuelta Larga es parte de la primera subcuenca del sistema hidrográfico de este municipio, conformado por ocho cañadas, donde existían cientos de casuchas sin la más mínima condición humana para vivir.

Personalidades se acercan a proyecto

Durante el período de construcción del proyecto habitacional que reubicó a las familias de la cañada Vuelta Larga, destacados empresarios y personalidades visitaron el lugar para respaldar moral y materialmente esta iniciativa. Entre ellos, José Luis Corripio Estrada, Félix García, Carlos Bermúdez, Juan Ramón Gómez Díaz, Abel Martínez y Monseñor Agripino Núñez Collado.