POR SOILA PANIAGUA
YAMASA.- Productores agrupados en la  Confederación Nacional de Cacaocultores (CONACADO) reclamaron ayer apoyo del Gobierno, para aportar más a la economía mediante el aumento de la competitividad y la productividad.

Los productores hicieron el reclamo en un acto que se llevó  cabo en esta comunidad, con la presencia de representantes del Gobierno y de diversas organizaciones ligadas al comercio y la producción de cacao.

De acuerdo a  Isidoro de la Rosa, director ejecutivo de la CONACADO, las exportaciones de cacao aportarán este año al país, más de US$65 millones, que convertidos a moneda nacional equivalen a  unos RD$2,600 millones.

En el acto,  José Martínez Roja, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de Productos No tradicionales de Exportación, ponderó la importancia de que el país aumente su competitividad y aproveche los altos precios internacionales, generados por los problemas que afectan a Costa de Marfil, país que exportaba el 47 pro ciento de la producción mundial.

Actualmente la tonelada de cacao cuesta US$1,700 y al productor local se le paga a unos RD$2,000.

«Los altos precios no serán para siempre. El peligro asecha», dijo Martínez Roja, tras llamar a los productores a mejorar su competitividad.

A la actividad asistieron Ricardo E. Munné, de la empresa procesadora del mismo nombre y  Leandro Mercedes, la cual se convirtió en un foro de denuncias y reclamos.

     «Los grandes aportes de la cacaocultura a la economía y a la ecología del país contrastan con las difíciles condiciones de vida de los 36,000  productores de cacao que hay en el país», explicó de la Rosa.

     Se explicó que actualmente las plantaciones de cacao ocupan una superficie de dos millones de tareas, cerca de un cuarto de las tierras boscosas del país y que de este cultivo viven alrededor de 300,000 personas.

     Datos suministrados por el director de CONACADO indican que durante los últimos diez años, las exportaciones tuvieron un volumen superior a las 50,000 toneladas con un valor aproximado por año a los US$60 millones.

     La producción de cacao pudiera duplicarse en pocos años si se venciera el rosario de problemas que afectan a los productores, puntualizó de la Rosa.

     Mencionó entre esos problemas el limitado acceso al crédito y  la tecnología, las penalizaciones que durante 28 años sufrió el sector, la baja productividad de las fincas a causa de su vieja edad, la incapacidad financiera de los productores para rehabilitarlas y el deterioro progresivo de los caminos vecinales y de otras infraestructuras rurales.

     «El 90% de las fincas de cacao son menores de 160 tareas y representan el 60% de la superficie cultivada, con un rendimiento promedio por tarea inferior a las 40 libras», precisó.

     La CONACADO agrupa a más de 10,000 productores de cacao, cerca de un tercio de todos los cacaocultores dominicanos y contribuye con un 20% de las exportaciones nacionales de cacao.

     Los participantes en la celebración del Día Nacional del Cacao abogaron por la creación de un programa de capacitación técnica a través de las organizaciones de productores, destinado a elevar la producción y la productividad, el cual tendría como meta capacitar a 12,000 productores por año.

       También propusieron la construcción de 400 kilómetros de caminos a un costo anual de RD$150 millones.

       A fin de frenar el acelerado proceso de emigración, la CONACADO sugirió al Estado construir villas cacaotaleras dotadas de sistemas de agua potable, electricidad, escuela y otros servicios básicos.

     La entidad considera prioritario un programa de titulación de tierras cacaotaleras, que con una inversión de RD$50 millones beneficiaría al 90% de los productores que tienen fincas menores a las 160 tareas.

     Otra demanda fue  la creación de al menos 12 agroindustrias para mujeres, a fin de procesar los subproductos del cacao, generar empleos y disminuir los niveles de pobreza.

     Urge, además, implementar un programa de multiplicación masiva de las mejores variedades de cacao para elevar la productividad de las fincas y para sustituirse progresivamente las viejas plantaciones.

      Adicional a estas medidas, la CONACADO propone destinar 60,000 tareas de las tierras del CEA radicadas en Monte Plata, El Seibo y Puerto Plata para sembrarlas de cacao como parte de un plan de desarrollo rural integral.

     De la Rosa afirmó que el país tiene grandes oportunidades para desarrollar la cacaocultura y de ese modo elevar su contribución al desarrollo y el bienestar del país.

     Esas oportunidades no deben desaprovecharse, sobre todo ahora que el producto tiene buena aceptación en los mercados internacionales, los precios son aceptables y el país está obligado a incrementar sus ventas en el exterior, dijo.

     «El cacao es el oro verde de los dominicanos. Es una de nuestras principales fuentes de empleo rural. Las plantaciones son las más importantes cubiertas vegetales que protegen el suelo y las aguas. El cacao es para nosotros la cosecha de los sueños y estamos obligados a luchar para que no desaparezca ahogada por la indiferencia estatal», sostuvo el dirigente de CONACADO.