Kabul, (AFP).- Un niño muere a diario en Afganistán a causa de los bombardeos, de los atentados suicidas y de los combates sangrientos entre los talibanes y las tropas occidentales, según cifras proporcionadas este miércoles por Radhika Coomaraswamy, subsecretaria general de la ONU.

Un total de «346 niños resultaron muertos en 2009 en el conflicto», declaró la representante especial del secretario general de Naciones Unidas para la Infancia en los Conflictos Armados, de visita en Kabul.

Especificó que 131 niños perdieron la vida en bombardeos y 22 en operaciones de las fuerzas especiales de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Y 128 fueron víctimas de los insurgentes en asesinatos o atentados suicidas, según Naciones Unidas.

«Una de nuestras principales preocupaciones es la información de que se recluta y utiliza a niños para combatir» en el ejército afgano, declaró Coomaraswamy, quien añadió que se tiene el mismo problema con los talibanes.

La ONU determinará un «protocolo» con la OTAN y con el ejército afgano para poner en libertad a los niños detenidos.

La OTAN negó haber matado a «niños» en sus operaciones especiales y afirma que tenían «edad de combatir» y que los soldados internacionales actuaban en legítima defensa.

Coomaraswamy también habló de la violencia sexual infligida a los niños y sacó a relucir sobre todo el caso de los «bacha bazzi», menores considerados como esclavos sexuales.

Desde hace tres años, la rebelión liderada por los talibanes ganó terreno pese al aumento regular del número de soldados extranjeros, que alcanzará los 150.000 en el verano (boreal) de 2010, de los cuales dos tercios son estadounidenses.