«Cada respiración cuenta. Detengamos la tuberculosis ahora»

«Cada respiración cuenta. Detengamos la tuberculosis ahora»

El Día Mundial de la Tuberculosis forma parte de la lucha contra una enfermedad que, pese a ser completamente curable, todos los años causa la muerte a más de 2 millones de personas, casi todas del mundo en desarrollo.

Para el combate contra la tuberculosis se dispone de una poderosa arma: el tratamiento de observación directa y corta duración (DOTS) para controlar la tuberculosis no sólo es una estrategia sumamente efectiva, sino también una de las intervenciones de salud pública más eficaces del mundo en proporción con su costo. Actualmente, el DOTS alcanza a casi el 70 por ciento de la población mundial.

En el pasado decenio, cada año se curó a más personas con ayuda del DOTS que el año anterior. Además, y en parte gracias al Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y el Paludismo, los recursos también van en aumento.

[b]¿ENEMIGO PARA TODA LA ETERNIDAD?[/b]

Aunque muchos creen que la Tuberculosis es una enfermedad acabada, las autoridades de salud del mundo continúan en alerta y llaman la atención sobre riesgos de nuevas epidemias asociadas con el SIDA y con la resistencia de la bacteria a los medicamentos.

Aunque le parezca un poco extraño, la tuberculosis es la enfermedad infecciosa que más muertes produce a lo largo y ancho de los continentes, afectando predominantemente poblaciones entre los 15 y 45 años.

Anualmente se registran en el mundo tres millones de muertes por causa de la tuberculosis, de los cuales 250 mil ocurren en América Latina, 675 mil en África, 950 mil en el Sudeste de Asia, 900 mil en el Pacífico Occidental, 175 mil en el Mediterráneo del Este y 50 mil en países industrializados y en Europa.

Se estima que, de los ocho millones de casos nuevos anuales, 564 mil ocurren en Latinoamérica, un millón 400 mil en África, dos millones 500 mil en el Sudeste de Asia, dos millones 566 mil en el Pacífico Occidental, 570 mil en el Mediterráneo Oriental y 400 mil en países industrializados como Estados Unidos, Canadá, Japón, Australia y en Europa.

La tuberculosis es causada por una bacteria conocida como Mycobacterium tuberculosis o Bacilo de Koch y es contagiosa. Cuando se adquiere, la infección puede ser dominada por el organismo, si se cuenta con un sistema inmune fuerte y una buena nutrición; quedar latente por años, o progresar y desarrollarse con síntomas como tos, fiebre, pérdida de apetito y adelgazamiento.

La enfermedad ataca principalmente a los pulmones, pero también puede presentarse en menor proporción en los ganglios, los huesos, las meninges y en general en cualquier órgano del cuerpo.

A pesar de que el bacilo se descubrió, hace más de 100 años y de que existen tratamientos específicos desde hace 50 años, en la actualidad constituye un problema de gran magnitud, tanto en países pobres como ricos.

Una gran preocupación es que los casos amenazan con incrementarse y generar una epidemia, debido al gran número que aparecerán asociados con el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida y por la alta resistencia que está tomando el Bacilo a los medicamentos.

Instituciones internacionales de lucha contra la enfermedad afirman que es urgente prevenir la resistencia del bacilo a los medicamentos, empleando el tratamiento adecuado y haciendo seguimiento hasta el final, a todo caso nuevo para evitar la progresión de la infección con estos gérmenes resistentes. De no hacerlo, esta enfermedad se haría nuevamente incurable, tal como lo era antes del descubrimiento de los antibióticos y quimioterápicos, en 1944.

[b]METAS EN EL CONTROL DE LA ENFERMEDAD[/b]

Al comienzo del milenio se suscribieron las metas de la campaña mundial contra la tuberculosis para el 2005 (cobertura DOTS diagnóstica de, al menos, 70 por ciento y tasa de curación de, al menos, 85 por ciento), sin embargo, las cifras mundiales más recientes reportan que se ha logrado solamente el 37 por ciento de detección de casos y el 83 por ciento de curación. El cumplimiento de las metas del 2005 es un paso muy importante para alcanzar las Metas del Milenio en el 2015.

Aunque los logros en la lucha contra la tuberculosis en la Región de las Américas han sido importantes, es definitivo que se consiga ahora un compromiso mayor de todos los estamentos gubernamentales, públicos, privados y sociales en el proceso de control y eliminación de la enfermedad.

La participación de la sociedad civil es muy importante si se pretende luchar efectivamente contra la tuberculosis, pero hasta ahora el aporte logrado de este sector social ha sido menos que óptima.

[b]TEMAS DEL DIA MUNDIAL[/b]

De acuerdo con las prioridades actuales en la lucha contra la tuberculosis, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) se suma a la propuesta realizada por la Iniciativa Stop Tb de la Organización Mundial de la Salud (OMS), y se plantean los siguientes objetivos de campaña para el Día Mundial de la Tuberculosis:

Transmitir un sentido de urgencia al movimiento mundial que lucha contra la tuberculosis y acelerar los esfuerzos de todos los interesados para alcanzar las metas del 2005.

Catalizar y estimular la participación de la sociedad civil y así construir un mayor compromiso social para la lucha contra la enfermedad.

[b]IMPORTANTE[/b]

– La tuberculosis es una enfermedad curable.

– Todo aquel que tenga tos y expectoración por más de dos semanas debe asistir al centro de salud más cercano.

– Los medicamentos contra la tuberculosis se ofrecen de forma gratuita en los establecimientos de salud de la República Dominicana.

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