PARIS, (AFP).- Los temores de un rebrote inflacionario en Estados Unidos, suscitados por comentarios alarmistas de algunos miembros de la Reserva Federal (FED), hicieron caer el jueves con fuerza los mercados bursátiles mundiales.

En los mercados europeos, la Bolsa de Francfort cerró con pérdidas de 1,03%, igual que Londres (-1,03%) y Paris (-1,25%). El índice Nikkei de la Bolsa de Tokio terminó su sesión del jueves en fuerte retroceso de 2,41%, el Hang Seng de Hong Kong cayó 2,12% y el SP/ASX 200 en Australia también perdió 2,12%. El jueves la bolsa se recuperaba en Nueva York, después de que el DJIA cayera el miércoles un 1,19%, y el Nasdaq un 1,70%.

“Empezamos a preocuparnos por los riesgos inflacionarios en Estados Unidos y en Europa, y ello afecta a los mercados”, aseguró un operador en París.

“Desde hace dos años, el petróleo y los riesgos de inflación son los dos pretextos que utilizan los inversores para vender de vez en cuando”, comentó Jean-Paul Pierret, director de estrategia bursátil en Natexis Bleichroeder.

Thomas Hoenig, uno de los directivos de la Fed y presidente de la Reserva federal de Kansas City, declaró el miércoles que el mayor riesgo para la economía de Estados Unidos era la emergencia de tensiones inflacionarias.

“La mayor inquietud ante el futuro es el riesgo de que vuelvan a emerger tensiones inflacionarias”, dijo en un discurso en Casper (oeste).

Esos comentarios se produjeron inmediatamente después de la publicación de un indicador de actividad estadounidense del sector de servicios, menos bueno de lo esperado y que revelaba un brote de inflación.

El índice ISM cayó a 53,3% en septiembre -los analistas esperaban un índice a 60%- mientras que el componente de precios subió a 81,4% contra 67,1% el mes anterior, el nivel más alto desde que fuera lanzado este indicador en julio de 1997.

En este contexto de inquietud inflacionista, el Banco Central Europeo (BCE) mantuvo el jueves sin cambios su principal tasa de interés a 2%, que sigue invariable desde junio de 2003, pero su presidente Jean-Claude Trichet advirtió que se requiere “gran vigilancia” contra riesgos inflacionistas.

Este statu quo era esperado por todos los expertos, pero se produce tras una serie de indicadores inquietantes sobre la estabilidad de los precios en la zona euro, integrada por los 12 países que utilizan la divisa única europea.

Según cifras divulgadas el viernes, la inflación en la zona euro subió a un 2,5% anual en septiembre, después de un 2,2% en agosto, impulsada por los altos precios del crudo.

“Es necesaria una gran vigilancia” ante esos riesgos inflacionarios, advirtió Trichet.

“Hemos debatidos los pros y los contras de una subida de los tipos de interés, y hemos decidido mantenerlos sin cambios”, explicó. Sin embargo, la BCE actuará sobre las tasas de interés “en cualquier momento, si fuera necesario”, dijo.

Un aumento de la inflación en la zona euro, acompañado por una recuperación de su crecimiento económico, induciría al BCE a subir sus tasas de interés, pero difícilmente ello ocurrirá antes de la primavera boreal de 2006, según los expertos.

La caída el jueves de los mercados bursátiles no debe sin embargo ser prolongada, opinan los analistas, que la justifican en parte por las fuertes subidas registradas el mes de septiembre en la mayoría de las bolsas europeas.