El ritmo anual de venta se situó en 647.000 unidades, el más bajo en 12 años, informó  el Departamento de Comercio.

Washington (EFE.- Las ventas de casas nuevas en Estados Unidos bajaron en noviembre más que lo esperado, un 9 por ciento, con lo que el ritmo anual de venta se situó en 647.000 unidades, el más bajo en 12 años, informó hoy el Departamento de Comercio.

Casi dos años después de que empezara a desacelerarse el negocio inmobiliario, la mayoría de los analistas esperaba que el ritmo anual de ventas en noviembre hubiese sido de 710.000 unidades.

El mes anterior las ventas de casas nuevas habían aumentado un 1,7 por ciento, hasta alcanzar un ritmo anual de 711.000 unidades.

En el último año, las ventas de casas nuevas han disminuido un 34,4 por ciento en todo el país.

La recesión más profunda del negocio inmobiliario en 16 años podría empeorar, ya que los incentivos ofrecidos por los vendedores no han alentado a los potenciales compradores, y el aumento de las ejecuciones hipotecarias sigue agregando viviendas a la venta.

El precio medio de la vivienda nueva ha bajado un 0,4 por ciento desde noviembre de 2006, y fue el mes pasado de 239.100 dólares. El informe del gobierno mostró que a fin de noviembre el número de casas a la venta había bajado un 1,9 por ciento a 505.000, el más bajo en dos años.

Pero como las ventas cayeron aún más, el tiempo medio en que una casa permanece en el mercado de venta subió de 8,8 meses en octubre a 9,3 meses en noviembre del presente año 2007.

La recesión del negocio inmobiliario se ha profundizado desde que la turbulencia de las hipotecas de alto riesgo en agosto condujo a una restricción mundial del crédito.

Las normas más estrictas para la concesión de préstamos y la restricción de los préstamos a prestatarios con crédito débil han puesto las hipotecas fuera del alcance de la mayoría de los posibles compradores.

Esto a su vez ha hundido los precios y ha demorado las ventas, ya que los interesados en comprar esperan mayores rebajas de los precios.

Fannie Mae, la mayor compradora de hipotecas en Estados Unidos, ha calculado que las ventas de casas nuevas probablemente caerán un 8,9 por ciento en 2008, después de una disminución del 25 por ciento este año.

En noviembre las ventas de casas nuevas estuvieron un 53 por ciento por debajo del mes más activo en julio de 2005.