La empresa Plaza Lama calificó ayer de “selectiva y violatoria” a las leyes vigentes, las presiones de la Dirección General de Aduanas para que pague unos RD$252 millones por concepto de impuestos alegadamente evadidos al fisco.

Afirmó, además, que no existe ninguna intervención judicial que la haya condenado al pago de una sanción “tan extravagante y abusiva”, la que afirma pone en peligro unos 3,000 empleos que genera esa empresa y la moral de su presidente, Don Mario Lama y de su familia.

A continuación el comunicado que Plaza Lama envió a este diario.

“Plaza Lama, S. A., frente a la campaña de infundios  que ha iniciado en su contra el señor Miguel Cocco, director General de Aduanas, desea formular la presente declaración:

1. Que ignorando el debido proceso de ley establecido en la Constitución de la República y en el nuevo Código Procesal Penal, en vigencia desde el 27 de septiembre del año en curso, la Dirección General de Aduanas ha desatado una grosera persecución, selectiva y maliciosa, contra esta empresa, tratando de ocupar sin orden de la autoridad judicial competente, nuestros establecimientos y reteniendo los furgones que tenemos en los distintos puertos nacionales.

2. La Dirección General de Aduanas, actuando en base a pretensiones caprichosas y arbitrarias, ha pretendido imponer a Plaza Lama, S. A., el pago de una supuesta reliquidación por la suma de RD$72,000,000.00, teniendo como único sustento de esta pretensión la acusación antojadiza de la Dirección General de Aduanas, bajo el alegato de que se ha incurrido en una supuesta evasión fiscal.

3. Asimismo, la Dirección General de Aduanas ha pretendido imponerle, realizando funciones del Poder Judicial, una supuesta «multa» a Plaza Lama, S. A., ascendente a unos RD$170,000,000.00, sin que exista intervención judicial que haya condenado a nuestra institución al pago de una «sanción» tan extravagante y abusiva.

4. Por otra parte, la Dirección General de Aduanas ha pretendido intimidar a nuestra empresa, presentándose a la misma con un contingente de empleados  con intención de cerrar todas nuestras instalaciones, irrespetando los derechos y garantías procesales de esta sociedad de comercio y poniendo en peligro la fuente de trabajo de más de 3,000 cabezas de familia.

5. La Dirección General de Aduanas, con sus actuaciones inconstitucionales e ilegales, ha causado un daño moral irreparable al señor Mario Lama y a su familia, quienes han contribuido, con más de  75 años de trabajo, al desarrollo del país.

6. Plaza Lama, S. A. ha querido colaborar con todas las investigaciones que vienen realizando las autoridades de la Dirección General de Aduanas y ha entregado formalmente los documentos que se le han requerido y ha abierto sus registros informáticos para que las autoridades del Ministerio Público puedan acceder libremente a  nuestros archivos. Sin embargo, la Dirección General de Aduanas, manteniendo una actitud inflexible, exige el pago inmediato de las sumas pre-indicadas, sin permitir ni siquiera una conciliación de cuentas entre ese organismo oficial y nuestra empresa.

7. La sociedad Plaza Lama, S. A. reconoce el derecho que tiene la Dirección General de Aduanas para realizar, dentro de los plazos legalmente establecidos  y observando el  debido proceso de ley, las reliquidaciones de las mercancías importadas.  De conformidad con ese derecho, en otras ocasiones hemos honrado  y cumplido este tipo de  requerimientos, como es normal en toda la práctica comercial del sector importador en República Dominicana.

8. Plaza Lama, S. A. tiene la profunda convicción de que en la República Dominicana, bajo la conducción del Honorable Señor Presidente de la República, Doctor Leonel Fernández Reyna, no va a sucumbir el Estado de Derecho y reitera que reconoce como una facultad indiscutible del Gobierno y las autoridades de Aduanas, realizar las investigaciones que consideren pertinentes para establecer las obligaciones tributarias de los contribuyentes; pero, reclama con la vehemencia que imponen las circunstancias, que las autoridades del Ministerio Público no permitan que se viole tan groseramente la Constitución de la República y el nuevo Código Procesal Penal.

Por último, tenemos la esperanza de que esta persecución arbitraria, abusiva, selectiva y caprichosa que se ha emprendido contra Plaza Lama, S. A.; causando daños difíciles de reparar, será conjurada por la intervención oportuna de las más altas autoridades del país.