Al saber que en Santo Domingo existe una calle en homenaje a “Tiradentes”, el recién acreditado embajador de Brasil en  República Dominicana se sintió tan emocionado que organizó para el próximo año un concurso titulado: “La avenida Tiradentes ¿Conoce el personaje histórico?”. Ya el de 2012, basado también en la vida y obra del héroe brasilero se está celebrando desde  octubre, a fin de estimular a estudiantes de portugués, con una dotación de 500 dólares.

José Marcus Vinícius de Sousa es un devoto seguidor de las acciones del mártir y un apasionado estudioso de la historia. Al leer cada domingo esta página llamó a quien la escribe para que explicara en una entrega quién fue Joaquim José da Silva Xavier, apodado Tiradentes porque entre sus diversos oficios estaba el de dentista. Ignoraba que en 1998  en HOY se había publicado la semblanza del patriota y el acontecimiento que representó la inauguración de la vía que, en 1948, cuando se realizó la denominación, correspondió a una parte de la actual avenida “Máximo Gómez”.

El traslado se hizo después de 1961, al eliminar el  aeropuerto “General Andrew” y extender la  “Máximo Gómez” que entonces moría en la avenida “México”. La Tiradentes es la continuación de la  “Alma Mater”, desde la “27 de Febrero”.

El embajador esperó a la reportera con documentos sobre los reconocimientos y veneración de Brasil hacia su prócer. Reservó biografía, fotos, lugares con el nombre de Tiradentes y hasta cantó una samba compuesta en honor a Tiradentes, en 1949, que en Brasil es como un himno. “Joaquim José da Silva Xavier / Morreu a 21 de abril / Pela Independencia do Brasil / Foi traído e nao trau jamais / A Inconfidencia de Minas Gerais / Joaquim José da Silva Xavier / Era o nome de Tiradentes / Foi sacrificado pela nossa liberdade / Este grande heroi / Para sempre ha de ser lembrado”. Es la “Exaltación a Tiradentes” por Mano Decio da Viola, Estanislau Silva e Penteado.

“Todos los niños de las escuelas la cantan y así se queda el personaje en la memoria popular”, significó el embajador brasileño.

Mostró fotos del Palacio Tiradentes, antigua Cámara de Diputados hasta 1960, denominado así después de demolida la prisión donde estuvo el héroe.

También hay en Brasil escuelas, calles, plazas y Ciudad Tiradentes quien es, además, patrón de la Policía, y  la Orden Honorífica Tiradentes. El estudio de esta memorable figura es obligatorio en la enseñanza primaria.

Desde que vino como jefe de misión, el 10 de septiembre pasado, una de sus primeras salidas fue recorrer la avenida Tiradentes, de la que tuvo referencias en 2008. Es lamentable que no conociera en su totalidad el tributo de este pueblo al patriota, porque se llevaron la placa de bronce y desapareció el busto de Da Silva Xavier.  Si se vuelve a instalar debería ser en una columna alta.

“Referente histórico”.  “Para mí, como ciudadano brasileño, estas ideas de libertad, desarrollo, lealtad, dignidad, la visión de progreso, que están hoy en la Constitución, tienen un referente histórico que incluye necesariamente a Tiradentes”, declaró el embajador.

El personaje inspira a este diplomático y jurista que prácticamente ha recorrido el mundo representando a su país. Evoca sus hazañas, lamenta el martirio, refiere sus sueños y recuerda hasta la divisa que el patriota tenía para la que sería la bandera de Brasil si resultaba victorioso: “Libertad, aunque tardía”.

Conoce la visita del Presidente Juscelino Kubitschek a Santo Domingo y con un gran mapa de Brasil  explica el traslado de la capital de su Patria, que también era un ideal en la época de Tiradentes. Brasil tuvo tres capitales, expresa, Salvador, de 1548 a 1576; Río de Janeiro, hasta 1960 y Brasilia, que fue inaugurada por Juscelino.

Para algunos dominicanos el exgobernante, que hizo escala en “Ciudad Trujillo” durante las celebraciones de la Feria de la Paz, agilizó aquella obra entusiasmado con las del evento trujillista. Es una especulación.

Pero contó el embajador que cuando éste anduvo en campaña política, un habitante de un pequeño pueblo le preguntó: “¿Sabe que en la Constitución de Brasil se establece que la capital debe salir de Río y venir para el interior?”, y él contestó que si salía electo cumpliría todas las normas de la Constitución, incluida esa. “Las ideas de Tiradentes repercutieron en toda la evolución política de Brasil, incluso, la de cambiar la capital venía de los Inconfidentes”, comentó Vinícius de Sousa en alusión al nombre del movimiento rebelde de Tiradentes contra el yugo portugués.

Considera altamente interesante el reconocimiento de los dominicanos al denominar Tiradentes una avenida “tan importante”. “Era un hombre del pueblo, su origen era humilde como el de muchos otros próceres latinoamericanos, a pesar de que entre sus compañeros había letrados y  personajes de la alta clase social”, dijo. Señaló que su movimiento no fue victorioso porque la Corona “hizo una represión muy fuerte”. En Brasil, agregó, Tiradentes   “tiene una respuesta popular muy positiva”. 

“Es una gran satisfacción esa avenida, es un punto más para adaptarme, “aplatanarme”, es una forma de integración, de mirar que tenemos muchos aspectos comunes; me causó una gran alegría y me motivó a organizar un concurso de redacción sobre Tiradentes en el Centro Cultural de Brasil”, declaró el embajador  Vinícius de Sousa.

Agregó que Tiradentes fue ejecutado en 1792 y después de siglos su nombre es aclamado por la multitud, “prueba de que está en el corazón del pueblo”.

Joaquim José da Silva Xavier nació en un pueblo del distrito de Pombal el 16 de agosto de 1746, hijo de Domingo da Silva Santos y María Antonia de Encarnación Xavier.

Fue buhonero, curandero, minero, dentista práctico, militar, activista político. Asumió el liderazgo de la Conspiración Minera, “primer intento serio de independizar a Brasil del Reino de Portugal a fines del siglo XVIII”.

Los líderes de la “Inconfidencia Minera” encontraron adhesión popular pero la conspiración fue delatada ordenando las autoridades la prisión de los conjurados. Después de tres años finalizó el proceso por traición a la Corona. Por orden de la reina Doña María I todas las sentencias fueron conmutadas, excepto la de Tiradentes que siguió condenado a muerte y ejecutado el 21 de abril de 1792. Sus restos mortales fueron distribuidos por los lugares donde pronunció sus discursos revolucionarios.

La avenida fue inaugurada el 21 de abril de 1948, coincidiendo con el 156 aniversario de la muerte de Joaquim José da Silva Xavier (Tiradentes), prócer de la Independencia de Brasil.