Algunos creadores de opinión, a través de las redes sociales, usan falsos titulares para conseguir que incautos escuchen, lean o vean sus publicaciones, desde el primero hasta el minuto final. Por ejemplo, “Madre recoge la cabeza de su hija atacada por una serpiente” y, al final de la publicación, explican que la hija mató una serpiente cortándole la cabeza y lo que la madre recogió fue la cabeza del animal que su hija tenía en el piso de su habitación como un trofeo.
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Es un ejemplo de mi autoría y el refrán que podría utilizar el pueblo dominicano con los llamados “influencers” o creadores de opinión pública sería, “No crean que por ser calvo se me ve el cerebro, ya que no soy tan calvo ni uso dos pelucas”, adagio venezolano que podría cambiarse por uno criollo que dice: “El dominicano es tan sabio, que conoce al cojo sentado y al tuerto durmiendo”.
Y, para los que usan mucho las “fake news” buscando “likes”, no se asombren si reciben, a cambio del engaño, muchos y reiterados “unlikes”.