“Este nuevo desafío traerá esperanza para los atletas y la juventud del continente americano”.

Así se expresó Miguel Camacho durante la ceremonia de apertura ayer del Campeonato Panamericano de Taekwondo que se celebrará hasta el 30 de este mes en el Palacio de Voleibol Ricardo (Gioriver) Arias del Centro Olímpico Juan Pablo Duarte.

Camacho, presidente de la Federación Dominicana de Taekwondo, manifestó que el deporte es una de las herramientas para mostrar lo mejor de la República Dominicana y que la disciplina que dirige es parte de esa propuesta.

Exhortó a los atletas de las diferentes categorías, a competir con gallardía y representar a sus respectivos países con la mayor entrega.

El Campeonato Panamericano abarca cuatro eventos. Ayer se dio inicio al Open G1 Poomsae (formas), mientras que este lunes y martes tendrá lugar el torneo Cadete-Junior.

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El Dominican Open G1 Kyorugui (combate) se desarrollará los días 27 y 28, en tanto que el certamen cerrará con el primer Campeonato Panamericano de Taekwondo Team Kyorugui (TK3).

“No es fácil organizar este tipo de eventos y la Federación de Taekwondo de República Dominicana los ha asumido con plena responsabilidad, eventos donde están presentes los campeones del mañana”, aseguró Mari Bernardo Mandel, secretario general de la Unión Panamericana de Taekwondo (PATU).

El viceministro de Deportes, Leopoldo Portes Soler, intervino en representación del titular de esa cartera, Francisco Camacho, quien envió un espaldarazo al evento y abogó por su éxito.

Estos cuatro eventos serán un importante trampolín, no solo como preparación para las competiciones americanas, sino para sumar puntos para el ránking mundial, los Juegos Centroamericanos y del Caribe de San Salvador, los Juegos Panamericanos de Santiago de Chile y los Olímpicos de París 2024.

La interpretación del himno patrio la ejecutó la banda de música del Ejército de República Dominicana, mientras que el espectáculo “Merengue Caribe”, de la Federación Dominicana de Arte y Cultura, y dirigido por Aída Guzmán, deleitó a los presentes. Claudia Feliz y Ricardo Ogata hicieron el juramento de los árbitros, en tanto que José Manuel Made y Alina Martirosyan tomaron la lealtad a los atletas.