A la hora de definir el “look” para las fiestas de Navidad, todas se imaginan en estas noches de fiesta con largos vestidos que se ajustan perfectamente a su cuerpo, sean del color que sean, pero… ¿por qué no elegir un esmoquin? También hay trajes de este tipo que se adaptan a la medida y se pueden combinar con cualquier elemento.
Aunque se trate del típico traje negro con camisa blanca -que no pasa nunca de moda-, la forma de los pantalones, los detalles de la blusa, los accesorios puntuales y el estilo de los zapatos serán clave para crear un conjunto perfecto para una noche especial.

Color

No solo está la opción de lucir un esmoquin negro, sino que muchas firmas ofrecen la posibilidad de llevarlo rojo, azul, verde o de cualquier color. De esta manera lucirá un estilismo que se aleja más del conjunto de oficina.
Jugar con los detalles
Los complementos que se elijan son casi tan importantes como el traje en sí. El collar, los pendientes y todas y cada una de las joyas con las que se complete el “look” de esmoquin deberán estar acorde al traje y ninguna debe llamar la atención ninguno por encima de las demás. Por otra parte, el peinado y los zapatos son otros puntos fundamentales para acertar de lleno con el estilismo. El mejor peinado para acompañar un esmoquin es un recogido o una melena corta, pues dejan ver la totalidad del estilismo, y en cuanto a zapatos: los que mejor combinan son los stilettos.