Toda la humanidad enfrenta riesgo y vulnerabilidad en el largo plazo, pero en el corto plazo estos riegos y vulnerabilidad tienden a concentrarse entre los más pobres de mundo.

Es por eso que, y  para garantizar la sostenibilidad de nuestra sociedad, tenemos que familiarizarnos con el cambio climático para poder combatirlo.

Los gases de efecto invernadero se encuentran dentro de la atmósfera, impiden que parte de la energía solar se pierda en el espacio. Por lo tanto, el efecto invernadero es un fenómeno natural, que ha existido siempre.

Estos gases naturales han aumentado y además se han sumado a los gases de efecto invernadero provenientes de la acción humana. En consecuencia, como hay más gases de efecto invernadero se acumula más radiación solar entre la tierra y la atmósfera.

El protocolo de Kyoto del 1997 sobre cambio climático, promovido por la Organización de la Naciones Unidas (ONU), tenía  el interés de que los países industrializados reduzcan sus emisiones de gases en un 8% por debajo del volumen de 1990.En noviembre del 2007 se reunieron para darle seguimiento en Indonesia, en la ciudad de Bali, 190 países, a debatir sobre este tema y solicitaron aquí a los 36 países más desarrollados industrialmente reducir antes del 2012 sus emisiones en un 5% por debajo de los niveles actuales y también se decidió consensuar en diciembre del 2009, en Copenhague, un nuevo acuerdo.

Como se observa, realmente existe preocupación con relación a las altas temperaturas de las emisiones de gases, hemos visto varias cumbres para tratar de mitigar los daños  que se producen a diario por el incremento del dióxido de carbono CO2.

 El cambio climático en el sector hídrico es de los problemas que debemos enfrentar, bastaría recordar,   las torrenciales lluvias acaecidas a lo largo de la historia que han producido cuantiosas pérdidas a los países pobres, cuando se producen avenidas que desbordan los cauces de ríos, arroyos, cañadas, y alteran las capacidad de los embalses de las presas, llevando consigo enormes caudales que arrasan con  las vidas de personas, animales  y plantaciones,  inconveniente que no ha sido analizado en ningunas de las cumbres que hemos citado anteriormente.