Cambio de actitud hacia educación

Cambio de actitud hacia educación

En los últimos años, el sector privado dominicano ha mostrado un cambio de actitud hacia la educación, fortaleciendo su apoyo a la enseñanza primaria, porque la considera fundamental en la formación de los recursos que enfrentarán los retos de la globalización.

De acuerdo con Arelis Rodríguez, directora ejecutiva de la Fundación Falconbridge, el sector privado dominicano sabe que necesita una fuerza laboral, no necesariamente bien preparada, sino apta para prepararse, “porque ahora lo que hay que enseñar al niño es a aprender”.

Agregó que el empresariado ha entendido que la educación es una responsabilidad de todos, no del Estado sino de la República Dominicana.

Los conceptos fueron externados ayer en un Encuentro económico extraordinario que celebró la sección Económica del periódico HOY, con la participación de Sergio Chávez y Arelis Rodríguez, representantes de la Falconbridge Dominicana y de la Fundación Falconbridge, respectivamente.

También participaron Cándido Rivera Torres, de Texaco; Elena Brineman, de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID); Alberto Triulzi y Marta Fernández, de EgeHaina, quienes hablaron sobre la importancia del Programa de Apadrinamiento de Escuelas que se desarrolla en diversas comunidades dominicanas.

«El país tiene que enfrentar su realidad y aprender cómo competir, pero la otra parte es cómo va a incluir a todos los dominicanos. El secreto de asegurar que los más pobres, con menos recursos, sean parte de esta gran aventura del país en el mundo, es la educación», dijo ayer la directora de la USAID.

Brineman añadió que para asegurar la sostenibilidad del desarrollo económico, se precisa que República Dominicana pueda competir en un mercado mundial, cada más abierto y globalizado y que para eso es necesario estar preparado, no sólo económicamente, sino contar con recursos humanos con muchos conocimientos.

De su lado, Rodríguez dijo que «yo pienso que en la medida que el mundo se achica y estamos hablando de ser competitivos a nivel mundial, se hace evidente que nosotros tenemos que hacer esfuerzos serios por mejorar la educación nuestra».

Refirió que cuando a República Dominicana se le compara con otros países, queda muy mal parada en un segundo lugar del peor, como país, situación que debe ser cambiada con el aporte de todos los sectores interesados en que la nación logre un real crecimiento económico y social.

«El sector privado nuestro ha demostrado ser eficiente en muchas cosas. Entonces, creo que hay un nivel de conciencia en ver que no todo se debe dejar al Estado y que todo deben participar. Lo otro es que se ha estado demostrando que tampoco es una millonada lo que se necesita para que funcione bien, sino de un propósito claro y a largo plazo», explicó.

Reconoció que la educación de una nación no se cambia en tres días y comentó que la Fundación Falconbridge lleva unos 14 años en el programa de apadrinamiento de escuelas, pero sólo ha sido en los últimos tres años que han empezado a ver algunas diferencias en términos académicos, porque la parte física se vio desde un principio.

«Parece que el Estado no tiene ese tiempo, porque sólo tiene cuatro años. Por lo menos, eso es lo que nosotros sentimos en Falconbridge», opinó.

Agregó que la competitividad, estar en un mercado donde todo tiene que ser eficiencia en sus ofertas productivas, ha llevado al sector privado a tener una mayor conciencia de que se debe sumar conocimiento a través de la educación.

«Uno de los retos principales es ver cómo se apoya al país en lograr un crecimiento sostenible que incluya a todos los dominicanos, que no deje a nadie fuera de los avances que ha tenido el país en los últimos diez años. Ahora estamos en una crisis, pero este país va a superarla. Yo tengo confianza que la economía de este país es sólida y que esta crisis es temporal». Sostuvo Brineman.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas