Con la publicación de las Cuentas Nacionales referenciadas al año 2007, en sustitución del actual que tiene como base el año 1991, las autoridades del Banco Central dan un paso hacia adelante en materia de mejor estimaciones y mayor nivel de información; también con ello nos unimos a los únicos cinco países de la región (Chile, México, Perú, Brasil y Ecuador) que han acogido las recomendaciones de la versión del 2008 del SCN de las Naciones Unidas.

Las cuentas nacionales o la contabilidad nacional es un registro numérico resumido que describe, a través de un conjunto de cuentas, una medida del comportamiento de los sectores económicos y el agregado final representa el comportamiento de la economía de un país en un periodo determinado. De acuerdo al economista austriaco Friedrich Schneider, “el objetivo de la contabilidad nacional es proporcionar una imagen numérica de lo que sucede en realidad en la vida y en la actividad económica en un determinado país y a la vez, supone una base de cifras para las actuaciones de los órganos estatales que, en mayor o menor medida la dirigen”.

Las cuentas nacionales es una herramienta relativamente reciente. En 1950 la OECE, precursora de la actual OCDE publicó el “Sistema Simplificado de Contabilidad Nacional”. Posteriormente la Organización de las Naciones Unidas publicó en 1953, “Un Sistema de Cuentas Nacionales y Correspondientes Cuadros Estadísticos”, que constituyó el primer sistema de contabilidad con alcance internacional. Este sistema de cuentas nacionales fue revisado, dando paso al SCN-1968, luego el SCN-93 y finalmente el SCN-2008

República Dominicana publica sus cuentas nacionales hace más de 15 años utilizando el SCN-1993 y tomando como año base el 1991. En vista de los cambios que ha experimentado la economía desde entonces, las autoridades del Banco Central asumieron el compromiso de adoptar el SCN-2008 y durante cinco años procedieron a realizar investigaciones en la economía del país y utilizar la asesoría de expertos consultores procedentes de las Naciones Unidas, de la CEPAL y del FMI.

Las nuevas cuentas, aparte de incorporar todos los cambios sugeridos por el SCN-2008, implicó importantes investigaciones como la Primera Encuesta Económica de la República Dominicana (PEE) 2007, el Primer Directorio Nacional de Empresas 2007, la Encuesta Nacional de Gastos de los Hogares (ENIGH 2006-2007), así como el IX Censo de Población y Viviendas 2010 y la Primera Encuesta a Instituciones Sin Fines de Lucro que Sirven los Hogares 2007.

Los datos de las Cuentas Nacionales para cada sector económico parte de realizar encuestas, captura de datos por parte del propio Banco Central o de otras instituciones, pero el aporte que hace cada sector al PBI depende de su ponderación y eso varía a lo largo del tiempo y de los cambios económicos en el país. Por eso los resultados con año de referencia 2007, en vez de 1991, arrojan que la economía es 6.7% más grande, que los servicios, construcción y minería han aumentado su ponderación en el PIB, mientras agropecuaria y manufactura lo han reducido. Eso explica también las diferencias en el monto del crecimiento del PIB en varios años de la serie 2007-2014.

En la actividad de presentación, el Gobernador Héctor Valdez Albizu anunció que el IMAE (Índice Mensual de Actividad Económica) que se calcula desde hace cuatro años y constituye una herramienta para las decisiones de políticas monetarias, está a disposición del público y en octubre será publicado un documento que contiene el análisis detallado de todos los cuadros que componen el sistema de Cuentas Nacionales, tanto en la corriente de bienes y servicios, como de las cuentas de los sectores institucionales, la clasificación cruzada actividad-sector institucional y como síntesis incluirá las Cuentas Económicas Integradas (CEI).

Con estas Cuentas Nacionales con año de referencia 2007, el IMAE, el sector externo en base al Sexto Manual de Balanza de Pagos del FMI, los Indicadores Monetarios y Bancarios Armonizados y otras iniciativas, así como una página web con amplios datos estadísticos, apuntan a una mayor transparencia e informaciones de mucha utilidad a los hacedores de políticas económicas, profesionales del área y empresarios.