Y le dijo Jehová: Ve, vuélvete por tu camino, por el desierto de Damasco; y llegarás, y ungirás a Hazael por rey de Siria. A Jehú hijo de Nimsi ungirás por rey sobre Israel; y a Eliseo hijo de Safat, de Abel-mehola, ungirás para que sea profeta en tu lugar. 1 Reyes 19: 15-16
A veces pensamos que ya hemos dado todo, debido a nuestra edad, la condición física, el tiempo que perdimos, la fuerza no es la de antes, etc. Lo mismo hizo Elías; pensó que ya su tiempo había terminado, su ministerio había acabado. En ese momento, Dios le dio un nuevo propósito.
Cuando Elías comenzó a caminar hacia su nuevo propósito, Dios le otorgó una misión: ungir a Azael, a Jehú y a Eliseo.
Cuando crees que ya llegaste a tu límite, que tu matrimonio no da para más, que tu talento ya llegó al final, que es imposible salir de la situación en que te encuentras, que nadie te toma en cuenta… En ese momento Dios te quita las barreras, porque Él no tiene principio ni fin.
Entonces, nuevos caminos se abren, porque tu Padre es el Señor de las nuevas y grandes oportunidades.
Dios no se olvida, de nada. Él cumple Su Palabra. Tal vez no sabes cuál es la voluntad de Dios para tu vida.
Simplemente espera la señal y, en ese momento, corre, porque la bendición viene para ti. Espera, que lo mejor está por venir.