La zona metropolitana –la Capital y la provincia Santo Domingo– se llenó ayer de agua por todas partes. Desde la madrugada del domingo a lunes empezó a llover y ayer en la mañana los aguaceros fueron intensos. Reportes procedentes del interior, sobre todo de pueblos del Cibao, dieron cuenta de inundaciones y zonas aisladas. Hasta  anoche había 4,117 personas desplazadas y 881 viviendas afectadas, 12 de las cuales fueron totalmente destruidas por la crecida del río Licey en Santiago. Meteorología pronosticó que las lluvias continuarán en casi todo el país hasta el jueves.

El Centro de Operaciones de Emergencias (COE) mantiene bajo alerta roja al  Distrito Nacional y las provincias  de San Cristóbal, Santo Domingo y Monte Plata, debido a las lluvias  por  una vaguada asociada a una zona de baja presión que sigue incidiendo en las condiciones del tiempo.

Mientras que Monseñor Nouel, Duarte, Dajabón, San Juan, San José de Ocoa, Independencia, Sánchez Ramírez, Barahona y  Santiago están en alerta amarilla. En alerta verde  María Trinidad Sánchez, Pedernales, Baoruco, Elías Piña, Valverde, La Vega y San Pedro de Macorís.

El COE reportó hasta anoche 4,117 personas desplazadas y 881 viviendas afectadas, 12 de las cuales fueron totalmente destruidas por la crecida del río Licey en Santiago.

 Anoche las personas comenzaban a retornar a sus hogares, luego que temprano fueran socorridas por la crecida del río Ozama en La Barquita Norte y La Barquita Sur, donde 30 familias del barrio La Cucaracha seguían refugiadas en una iglesia cristiana del  sector.

John García, de la Defensa Civil de Santo Domingo Norte, dijo que continuarán alerta, porque aunque el río comenzó a descender, de seguir lloviendo en Monte Plata volvería a subir en cualquier momento. El río Ozama inundó casas en los barrios La Zurza, Los Pinos, Majagual y La Barquita.

Comunidades inundadas. Las autoridades reportaron que en la provincia de Monte Plata están incomunicadas   Chirino, El Talao y Mata los Indios. En total 404 familias de esta comunidad quedaron aisladas.

 En   Tamboril, 265 viviendas resultaron inundadas de las comunidades El Batey, Arenoso, Felipe Durán, Barrio Hico y Canca.

También en San Pedro de Macorís, fruto de las crecidas del río Soco, quedaron aisladas  las comunidades Cabeza de Toro, Lima, Bejucar, Choco Primo, San Piña, La Lechuga, Batey Verde y Paso del Medio. No se reportaron afectados.

En el Seibo, Miches, y en La Altagracia, Bávaro, Punta Cana e Higüey quedaron aislados. El badén de la laguna Nisibón se inundó.

En Dajabón se reportó el colapso del puente que enlaza las comunidades El Peñón con El Aguacate, por el desbordamiento de la cañada Ramidod.

Las intensas lluvias de ayer. Los aguaceros que comenzaron ayer temprano convirtieron la ciudad de Santo Domingo en un caos, debido a las grandes lagunas que se formaron por calles y grandes avenidas, trastornando el tránsito vehicular y de peatones.

La desorientación de la gente que se dirigía a su trabajo en vehículo o a pie era grande, pues por más vueltas que daban a la redonda en procura de un área que fuera transitable, lo que encontraban eran mayores anegaciones. Era como si la ciudad capital tuviera “el agua al cuello”.

La irritabilidad, no era para menos. El desagüe pluvial siempre ha sido deficiente, pero  “el Gobierno tiene dinero para hacer Metros y elevados, y no para resolver este problema que se presenta cada vez que cae un aguacerito”, se quejaban algunos.

A grandes arterias como la John F. Kennedy,  Ortega y Gasset, Gustavo Mejía Ricart, Winston Churchill, avenida Luperón y otras, sólo les hacían falta las palomas para ser una “Venecia”; las grúas no daban abasto porque la gran cantidad de agua acumulada no tenía preferencia por ninguna marca de vehículo.

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Autoridades alerta

Brigadas de  la Defensa Civil, la Cruz Roja y otros organismos de socorro se mantenían ayer alerta, principalmente en las periferias de los sectores ubicados en las márgenes del río Ozama,  para en caso  necesario desplazar a los residentes de esos sectores hacia un lugar seguro.

 Albergues listos

El COE dijo que mantienen los albergues identificados y listos para, de ser necesario, trasladar a las personas en peligro.

Lluvias seguirán hasta el jueves;   100 familias dejan La Barquita en SDE

Cerca de cien familias   tuvieron que abandonar ayer “voluntariamente”    La Barquita del sector Puerto Rico de Los Mina, en el municipio de Santo Domingo Este, debido a las inundaciones provocadas por las lluvias  en  la mañana y en la   tarde. Los aguaceros continuarán hasta el jueves.

Los comités de la Defensa Civil del sector, se declararon en  emergencia ante el anuncio de las autoridades de   que se esperan lluvias por tres días.

Julio César Segura, encargado de la Defensa Civil en  La Barquita de Los Minas, dijo que las lluvias de las últimas horas en la zona, provocaron inundaciones de más de cincuenta viviendas ubicadas a orillas del río Ozama.

 La tarde de ayer, se vio a muchas familias sacar agua con cubetas y jarros agua de sus aposentos.

Segura indicó que esta  situación  se produce cada año para la temporada ciclónica.  

Declaró que aún las aguas del río no se han desbordado y que cuando eso se produzca, si  llega a ocurrir, entre mil y mil doscientas familias residentes en la rivera del Ozama, tendrán que ser auxiliadas y que para esto será necesario la asistencia de la Policía.

 José Antonio Batista, del comité de la Defensa Civil en el barrio Vietnam de Los Mina, estación 9-8, manifestó que  trabajan en labores preventivas y que están preparados para ayudar a las familias que lo necesiten.

 Ayer, brigadas del Ministerio de Salud Pública encabezadas por el doctor Fernando Guante, director de Salud del Área 2 en Santo Domingo Este, indicaron que permanentemente  visitan el lugar para hacer frente a las enfermedades más comunes como  diarrea, leptospirosis y  cólera de la que se han detectado dos casos.

  “Buscamos prevenir brotes de diferentes enfermedades”, dijo el funcionario durante su recorrido por el lugar.