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POR ANNA JIMÉNEZ
El cáncer de mama es el desarrollo de células anormales en los senos. Estas células crecen y reemplazan a los tejidos sanos normales. El cáncer de mama es una enfermedad que puede tratarse. La detección en sus inicios es la clave para sobrevivir al cáncer de mama. El cáncer generalmente empieza como una bolita. Sin embargo, con el tiempo, la bolita puede crecer y proliferar hacia las áreas cercanas, por ejemplo los músculos o la piel, así como a los ganglios linfáticos debajo del brazo.
Finalmente, el tumor puede extenderse a órganos vitales como el hígado, el cerebro, los pulmones y la espina dorsal.
Una de cada ocho mujeres desarrolla cáncer de mama. A pesar del progreso reciente en la detección inicial, así como tratamientos mejores, el cáncer de mama es actualmente la tercera causa de muerte entre las mujeres en los E. U.
¿CÓMO OCURRE?
No se sabe la causa del cáncer de mama. Cualquier mujer puede tener cáncer de mama. Aunque es mucho menos común, los hombres también pueden tener cáncer de mama.
Algunas mujeres tienen mayor probabilidad de desarrollar el cáncer de mama que otras.
Los factores que aumentan su riesgo de tener cáncer de mama incluyen:
tener una madre o hermana con cáncer de mama
jamás haber tenido hijos
haber tenido el primer hijo después de los 30 años
un historial de exposición a la radiación
fumar
terapia de hormonas (estrógeno)
uso excesivo de alcohol
lesión al seno
obesidad.
Hasta el momento no existe evidencia definitiva de que el uso prolongado de las píldoras para el control de la natalidad causen cáncer de mama, pero esta posibilidad también continúa investigándose. También, al parecer, la ingestión de estrógeno después de la menopausia ocasiona un ligero aumento en el riesgo de contraer cáncer de mama.
Los investigadores también están estudiando ciertos virus como posibles causantes de cáncer de mama.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS?
Con mayor frecuencia, el primer signo de cáncer de mama es una bolita en el seno. Generalmente la bolita es indolora. Puede crecer lentamente o rápidamente.
Otros síntomas del cáncer de mama incluyen:
cambio de color, hundimiento, arruga o costras en la piel en una parte del seno
un cambio en el tamaño o forma del seno
líquido que sale del pezón
sentir una o más bolitas en la axila.
¿CÓMO SE DIAGNOSTICA?
Para detectar el cáncer de mama lo antes posible, a partir del momento que tenga edad suficiente para someterse a exámenes pélvicos anuales, deberá usted:
Hacerse un autoexamen del seno cada mes.
Someterse a un examen del seno realizado por su profesional de la salud por lo menos una vez al año.
Hacerse una mamografía inicial entre los 35 y 39 años de edad. Luego, a partir de los 40 años, hacerse mamografías de seguimiento cada año o cada dos años de acuerdo al programa recomendado por su profesional de la salud.
A partir de los 50 años, debe hacerse una mamografía cada año. Si usted tiene alto riesgo de cáncer de mama, empiece hacerse las mamografías con regularidad a partir de los 35 años de edad, o antes.
La mayoría de las bolitas en los senos no son causados por cáncer.
Con frecuencia son quistes llenos de líquido dentro del tejido del seno, que se agrandan y se achican con el ciclo menstrual. Pero todas las bolitas deben ser evaluadas.
La evaluación generalmente comprende:
un examen hecho por un profesional de la salud
una mamografía (una radiografía especial de los senos)
una biopsia con aguja o quirúrgica (estas pruebas deberán realizarse aunque la bolita no se vea en la mamografía).
Si le hacen una biopsia por aguja, (también llamada aspiración por aguja), primero le pondrán un anestésico local para insensibilizar el área de su seno en cuestión.
Después su profesional de la salud inserta una aguja en la bolita del seno y saca líquido o tejido de la bolita.
Si la aguja se llena con líquido, la bolita es un quiste lleno de líquido y no es cáncer.
Al sacar el líquido también desaparece la bolita. El tejido sacado con la aguja se analizará en el laboratorio.
Si le hacen una biopsia quirúrgica, su profesional de la salud le pondrá un anestésico local, hará un corte en el seno, y retirará la bolita.
Una muestra del tumor deberá examinarse bajo un microscopio. Puede hacerse una prueba de receptor de estrógeno (ER) en la muestra de la biopsia para ver si las hormonas promueven el crecimiento del cáncer en la muestra.
También podrían quitarle nódulos linfáticos de su axila (disección de nódulos axilares) para ver si el cáncer se ha propagado más allá del seno.
¿CUÁL ES EL TRATAMIENTO?
Si una bolita en el seno es cancerosa, las decisiones sobre el tratamiento las tomará usted, su cirujano y su oncólogo (el especialista en cáncer).
Estas decisiones se basarán en el tipo y tamaño del cáncer y si ha proliferado a los ganglios linfáticos u otras partes de su cuerpo.
Los tratamientos quirúrgicos posibles son lumpectomía (extirpación del tejido canceroso solamente) o mastectomía (extirpación del seno completo).
También podrían extirpar nódulos linfáticos de su axila. Otros tratamientos posibles son la radioterapia y la quimioterapia.
Estos tratamientos distintos pueden usarse individualmente o en combinación.
Si usted está considerando una mastectomía debe hablar con su cirujano acerca de sus opciones y la programación para la cirugía reconstructiva.
¿CÓMO PUEDO CUIDARME?
Si a usted le han diagnosticado cáncer de mama:
Platique con su profesional de la salud sobre su cáncer y las opciones de tratamientos para que pueda comprenderlas.
No dude en obtener una segunda opinión.
Infórmele a su profesional de la salud si su tratamiento le produce molestias. Es posible que tenga remedio.
Después de su tratamiento, vaya al consultorio de su profesional de la salud para que le hagan chequeos de seguimiento.
Siga sometiéndose a exámenes mensuales del seno, aunque le hayan extirpado ambos senos quirúrgicamente, para buscar recurrencia del cáncer.
Existen muchos servicios de apoyo disponibles para las mujeres que tienen cáncer de mama. Usted puede encontrar los nombres de los grupos y agencias con su profesional de la salud o a través de la oficina local de la American Cancer Society (Sociedad Oncológica Norteamericana).
La supervivencia después del cáncer de mama continúa mejorando.
La mayoría de los tumores son descubiertos por las mujeres que los tienen. A medida que más mujeres se hacen autoexámenes regulares de los senos, más cánceres se descubren en sus inicios.
A medida que mejora la tecnología de detección usando mamografías y otros procedimientos, más cánceres se detectan antes de que podamos sentirlos o sospechar de su existencia.
La detección temprana y el tratamiento del cáncer de mama aumentan enormemente sus posibilidades de supervivencia.
Para ayudar a detectar el cáncer de mama en sus inicios:
Hágase un autoexamen del seno mensualmente.
Sométase a mamografías anuales a partir de los 50 años.
Jamás ignore una bolita o un cambio en la apariencia o la sensación de un seno. Recuerde que un tumor canceroso generalmente no duele.
RECOMENDACIONES
Es necesario tomar en cuenta algunas recomendaciones que resultarán muy útiles si quiere mantenerse alejada del cáncer de mama, estas son:
1. Si pasa de los 35 años hacerse una mamografía o ecomamografía para mayor precisión diagnóstica.
2. Es importante tener controles ginecológicos al menos dos veces al año, en los cuales el médico le realiza un examen minuscioso de sus mamas y toda el área circundante a las mismas.
3. Todos los meses unos 8 días después de la menstruación es necesario que haga una costumbre de realizarse un autoexamen de los senos. Recuerde una detección a tiempo puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
DEPRESIÓN TRAS EL CÁNCER
El sentirse usado, menoscabado o exhausto debido a las excesivas demandas de energía, fuerza o recursos personales, crea además intensas repercusiones en la persona y en su medio familiar.
Estados de fatiga o frustración son el resultado de la devoción a una causa , estilo de vida, o relación que fracasó en producir la recompensa esperada.
La progresiva perdida del idealismo, de la energía y el propósito que experimentan muchos profesionales que trabajan ayudando a otras personas son el resultado de sus condiciones de trabajo.
El síndrome de agotamiento, es el último paso en la progresión de múltiples intentos fracasados de manejar y disminuir una variedad de situaciones laborales negativas.
La lista de síntomas psicológicos que puede originar este síndrome es extensa, pudiendo ser leves, moderados, graves o extremos.
Uno de los primero síntomas de carácter leve pero que sirven de primer escalón de alarma es la dificultad para levantarse por la mañana o el cansancio patológico, en un nivel moderado se presenta distanciamiento, irritabilidad, cinismo, fatiga, aburrimiento, progresiva perdida del idealismo que convierten al individuo en emocionalmente exhausto con sentimientos de frustración, incompetencia, culpa y autovaloración negativa. Los graves se expresan en el abuso de psicofármacos, ausentismo, abuso de alcohol y drogas, entre otros síntomas.
Es la repetición de los factores estresantes lo que conforma el cuadro de crónico, que genera baja de la autoestima, un estado de frustración agobiante con melancolía y tristeza, sentimientos de impotencia, pérdida, fracaso, estados de neurosis, en algunos caso psicosis con angustia y/o depresión e impresión de que la vida no vale la pena, llegando en los casos extremos a ideas francas de suicidio.
Muchos expertos dicen que es una enfermedad de la sociedad moderna, donde el trabajo deja de ser una fuente generadora de bienestar, para transformarse en un causal de desilusión y que es la sociedad quien debe deshacer el camino mal transitado.
El diagnóstico precoz, la terapia médica y psicológica, cambios en la calidad de alimentación y la distribución del tiempo de sueño- trabajo- esparcimiento, permiten revertir muchos cuadros.
Lo más positivo para estos estados es gestionar técnicas de recursos humanos y materiales para humanizar la relación laboral y gratificar al individuo en el sentido amplio del término con lo cual se actuaría previniendo el primer eslabón que encadena a estas dolencias y mejorando la CALIDAD DE VIDA.
