POR JUAN M. RAMIREZ
El Gobierno dominicano advirtió anoche a la comisión de legisladores de Estados Unidos que visita el país que no aceptará injerencia de nadie en asuntos que tienen que ver con la soberanía de la República Dominicana.

La advertencia fue hecha por el secretario de Relaciones Exteriores, Carlos Morales Troncoso, a seis legisladores norteamericanos que ayer visitaron bateyes de San Pedro de Macorís, donde deploraron el estado en que se desenvuelven sus habitantes.

El funcionario manifestó que los congresistas de la Cámara de Representantes de Estados Unidos están perdidos en cuanto a la realidad del país, ya que nadie puede tener una opinión acabada de una situación, con tan solo algunas horas de visita a una nación extraña.

Expresó que las informaciones que tenía anoche era de que la comisión de legisladores norteamericanos fue prácticamente “secuestrada” en una iglesia de San Pedro de Macorís, donde un grupo de organizaciones no gubernamentales les expusieron su verdad.

Morales Troncoso deploró el que los extranjeros sean víctimas de un montaje por parte de grupos que lo único que pretenden es hacer daño a la nación dominicana.

“Yo lo quiero es que vengan por más días y que vean la realidad dominicana, pero montaje no”, sostuvo el Canciller.

El funcionario señaló que los congresistas estadounidenses hablaron sobre el deplorable estado de las viviendas en los bateyes, pero que el diputado Víctor (Ito) Bisonó ripostó que en Arizona se observan peores situaciones con los mexicanos.

Consideró que los legisladores de Nueva York, California y La Florida se mostraron totalmente desorientados, por lo que exhortó a que hagan su trabajo, tal como él lo hace cuando va a Estados Unidos.

“Me dicen que un grupo de ONG los trancaron en una iglesia y les dijeron su verdad, pero tienen que oír todas la verdad, pero nosotros aquí, en un grupo muy plural, oyeron nuestros pareceres, porque tienen que escuchar el parecer de lo que es un grupo plural”, sostuvo.

En la reunión del Morales Troncoso con los legisladores estadounidenses estuvieron el embajador Miguel Mejía; el secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Max Puig; los diputados Ito Bisonó y Radhamés Castro, así como el escritor y Premio Nacional de Literatura, Manuel Núñez.

El grupo de legisladores de Estados Unidos estuvo acompañado por el embajador de esa nación, Hans Hertell, quien en dos ocasiones cortó las preguntas de los periodistas, alegando que se hacía tarde.

La reunión, que estaba pautada para iniciar a las 5:00 de la tarde, comenzó a las 6:35 p.m., en el despacho del Canciller Morales Troncoso, ya que los extranjeros que venían de San Pedro de Macorís, llegaron retrasados, y concluyó casi dos horas después.

Morales Troncoso dijo que la comisión de representantes de Estados Unidos tenía programado reunirse con empresarios, pero lo ponía en dudas, debido a la premura de los legisladores, quienes tienen previsto marcharse en la mañana de hoy.

El diputado Bisonó lamentó que los congresistas extranjeros estuvieran en el país por tan poco tiempo y que fueran dirigidos a lugares previamente preparados, ya que visitaron un batey cerrado en San Pedro de Macorís.

Sostuvo que el Canciller Morales Troncoso habló con propiedad, y recordó que en todos los foros internacionales, el Gobierno dominicano ha pedido ayuda para resolver el problema haitiano, sin que hasta ahora se haya hecho nada.

Tanto Ito Bisonó como el diputado Castro mostraron su inquietud, ya que los seis congresistas norteamericanos son del Partido Demócrata, los mismos que se oponen a la firma del Tratado de Libre Comercio (TLC)

Castro aseguró que la intención de los legisladores del Partido Demócrata es utilizar la situación de los bateyes para sustentar su campaña en contra de la República Dominicana, sobre todo, en interés de eliminar la cuota azucarera para beneficiar a los productores norteamericanos de remolacha y maíz.

Pelegrín Castillo precisó que la visita de los legisladores norteamericanos es para denotar la situación de los bateyes, pero confía que luego de escuchar los pormenores en la reunión cambien de opinión.

“Si están realmente empeñados en mejorar la suerte de los haitianos en la República Dominicana, tendrán que comprometerse seriamente en la solución de los problemas de los haitianos, pero en Haití”, precisó.

En tanto, el escritor Manuel Núñez definió como un “chantaje” la utilización del racismo como mecanismo para atacar a la República Dominicana, ya que no es cierto que en el país exista un problema étnico, como se pretende dar a conocer.

“Y no hay ningún problema racial ni de persecución racial con los haitianos, como se ha querido insinuar para tratar de manipular a la República Dominicana y acusar de los problemas haitianos al país y destruir nuestra soberanía, cosa que no aprobamos”, subrayó Núñez.