Canó recupera confianza y mejora su producción con los Yanquis

Canó recupera confianza y mejora su producción con los Yanquis

POR WILL GONZALEZ
De ESPNDeportes.com
NUEVA YORK —
Una de las razones porque los Yankees no están disfrutado de su temporada es que sus bateadores zurdos no comenzaron el año bateando bien.

En lo que va del 2007, hasta el 21 de julio, Bobby Abreu, Robinson Canó, Johnny Damon, Jason Giambi, y Doug Mientkiewicz estaban bateando muy por debajo de lo que están acostumbrado.

Abreu tiene promedio de bateo de por vida de .300 pero él estaba bateando .268 en lo que va del año.

Canó bateaba .285 pero su promedio de por vida era .310.

Damon estaba bateando sólo .236 cuando de por vida su average era .287.

Giambi estaba acostumbrado a promediar 35 jonrones y 113 remolques por temporada, pero esté año él sólo contaba con siete cuadrangulares y 23 impulsadas gracias a una lesión en su pie izquierdo.

Mientkiewicz es un bateador de .268 de por vida pero su promedio era .226 cuando sufrió la conmoción cerebral que lo sacó de comisión el segundo de junio.

El único bateador siniestro que estaba bateando cerca de su promedio de por vida era Hideki Matsui (.280, 16 jonrones, y 61 remolques en el 2007 vs .295, 24 cuadrangulares, y 94 impulsadas por año). Sin embargo, la producción del japones no era muy consistente a lo largo de esta temporada.

Abreu, Damon, Mientkiewicz, y Matsui tienen 33 años de edad. Giambi tiene 36. Todos ellos están en esa etapa en la carrera de un atleta cuando es normal empezar a sufrir decaídas de producción.

No se puede decir lo mismo de Canó. El joven de 24 años de edad está en la flor de su carrera. La bajada es anormal para un pelotero de su calibre y algo nuevo para el veterano de tres temporadas en las mayores. Él terminó su primer año en la gran carpa con promedio de .297, 14 jonrones, y 62 impulsadas. El año pasado, él bateó .342, con 15 vuela cercas, 78 remolques, y fue elegido por los fanáticos como el defensor de la segunda base del equipo de la Liga Americana. Desafortunadamente, Canó no llegó a jugar en el Clásico de Verano por culpa de un estirón en el tendón de la corva de su pierna izquierda.

¿Qué le pasa este año al intermedista dominicano?

«Ha sido una temporada de altas y bajas, pero no todo el tiempo la vida es color de rosa», le comentó Canó a espndeportes.com desde su casillero en Yankee Stadium después de una doble tanda contra Tampa Bay.

El jugador de cuadro prefiere no hablar mucho de sus dificultades esta temporada. Él está enfocado en seguir mejorando ya que él ha empezado a jugar mucho mejor.

Mayo fue un mes difícil para el nativo de San Pedro de Macorís: a mediados del mes su promedio alcanzó el punto más bajo de la temporada (.234) y el 19 de mayo, él sufrió la vergüenza de cometer tres errores en un juego contra los Mets.

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