Hay que ser de hierro para transitar ´la San Martín camino hacía la Ortega -o al Periódico HOY-, sin reparar en lo lindo que está el renovado parquecito de La Javilla. Sobre todo porque los vecinos de los ensanches La Fe y Kennedy lo han hecho rápidamente suyo (fue renovado en agosto pasado).
Es que la risa, los pasos y el fuin fuan de los niños en plena diversión es contagioso. El colorido da nueva vida a esta vieja calle y cuando nos recordamos a esa edad, en situaciones similares a la que viven los niños hoy, se mueve el alma.