Hasta un día casi completo en largas filas tienen que pasar los estudiantes de la estatal Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) para algo tan simple como pagar la inscripción.
Este proceso tedioso, lento y desordenado contrasta con la modernidad que propagan sus autoridades, a pesar de un moderno portal electrónico a través del cual insisten en que sus más de 185 mil estudiantes se inscriban vía Internet, y que por vez primera este nuevo año impartirá asignaturas online.
Ayer, en su sede, las largas filas rodeaban el Polideportivo Tony Barreiro, donde solo cinco cajeros fueron habilitados para los estudiantes que desde la madrugada y a toda hora acuden al centro.
Esta situación se repite cada semestre, según estudiantes consultados, quienes atribuyen a sus autoridades hacer nada para resolver ese problema.
Las inscripciones comenzaron el 24 de noviembre y concluyen hoy, 16 de diciembre. Sin embargo, si los estudiantes no pagan en 24 horas, luego de inscritos, se los penaliza con no incluir materias extras y ver sus calificaciones.
El sistema de inscripción por Internet comenzó en el 2006 para el primer semestre de 2007; la automatización de los procesos se hizo a través de las empresas Sinergit y Sungard Higher Education a un costo de RD$350 millones.
Desde el 2007 los estudiantes reciben un nuevo carné de identificación con el que, al inicio de su implementación, las autoridades garantizaron que permitiría a los estudiantes pagar todos los servicios que ofrece la UASD a través de cajeros bancarios o por Internet. Empero, hasta ahora no ha sido implementado.
Los estudiantes denunciaron que la plataforma web también está presentado problemas que provocan rezagos en la inscripción. Otros se quejaron del cobro personal de empleados asignados a las cajas a cambio del servicio.