Cápsulas genealógicas
Un eslabón encontrado en los Smester

<STRONG>Cápsulas genealógicas</STRONG> <BR>Un eslabón encontrado en los Smester

Pablo Smester, farmacéutico natural de Pointe-a-Pitre, Guadalupe, es el tronco de este apellido en República Dominicana. Sobre su vida son pocos los detalles que se conocen: asentado en Santiago de los Caballeros, figuraba ya como boticario en 1876. En 1896 era agente de la casa Muntagu de París. Era propietario de la farmacia “La Salud”, la cual todavía existía en 1896 y de la que era dueño en 1897 Furcy Ferreras. Murió en Santiago el 29 de septiembre de 1907.

Con Trinidad Marrero (Babá), procreó siete hijos: Rosa, Clementina, quien no dejó descendencia; Dolores Angustia (Lilí), casada en 1915 con Marcos Evangelista Otaño e igualmente sin descendencia; Eulogia (Yoya), también sin hijos; María Georgina (Genita), fallecida sin prole; Mario, casado con Petronila Peña (Cusa); José Arístides, esposo de Clara Tolentino; y José Gabriel Smester Marrero. Fue padre también de Rafelita Smester Valdez, casada con Ismael Fernández, y de Adriano Valdez, esposo de Ubaldina Hilario.

De sus hijos, sin dudas la más conocida fue Rosa (Santiago, 30 agosto 1874-15 febrero 1945), “uno de los pilares más sólidos del magisterio cibaeño y noroestano a través de todos los tiempos”, como la calificó Julio Jaime Julia. Se inició en el magisterio en 1897, impartiendo clases de francés para niños en su casa. Fue profesora de la Escuela Superior de Señoritas de Santiago en 1902, donde tuvo a su cargo las materias de Sintaxis, Literatura, Historia General y Francés. Renunció a estas tareas en 1908. En enero de 1913 abrió en su ciudad natal el colegio Santiago, pero a fines de ese mismo año fijó domicilio en Monte Cristi. Allí nació, de su unión con Juan Grullón, su hijo Federico Máximo Smester, con quien se trasladó a París en 1927 para acompañarle en el inicio de su carrera como médico en la Sorbona; vivió en esa ciudad hasta 1934. En 1922 fundó la sociedad benéfica San Vicente de Paúl, que sostuvo el hospicio para ancianos homónimo que todavía existe en Santiago.

Clementina y María Georgina fueron también educadoras: Clementina tenía un plantel particular en 1902 y en 1915 fue electa presidenta sociedad El Magisterio en Santiago y Noble Gobernadora de la Cámara de Ruth No.4856 “Perla del Yaque”, de la logia Unión Santiaguesa, una “asociación humanitaria inspirada en las prácticas cristianas”. María Georgina abrió una escuela particular en 1904. Mario fue mecánico y Arístides herrero, discípulo del mecánico y herrero cubano Juan Bautista Creus Venus.

José Gabriel Smester Marrero fue el eslabón perdido de esta familia. Tras la muerte de su padre, el 14 de octubre de 1908 partió para París vía Puerto Plata a unirse con su tío “el reputado y distinguido Dr. Smester”, como lo consigna el periódico santiagués El Diario de esa fecha; ese mismo medio informaba en 1909 que estudiaba en la capital de Francia.

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