Para el economista Guillermo Caram, en la propuesta de reforma fiscal presentada por el gobierno, la vertiente tributaria domina el espacio por encima de las previsiones para contener el gasto. Dice que esto es sumamente arriesgado, dadas las experiencias nacionales e internacionales al respecto.
Esto así porque el gobierno ha presentado un presupuesto 2025 con gastos corrientes superando en 53 mil millones los ingresos corrientes: un 4 % de gastos por encima de los ingresos, porcentaje que tenderá a aumentar ya que ordinariamente la ejecución presupuestaria es mayor que lo programado.
“Un gobierno que presupueste gastar en partidas corrientes más de lo recaudado carece de autoridad moral para imponer nuevos tributos”, dijo Caram.
Más aún, expuso, al ponderar las amortizaciones presupuestadas a la deuda pública, sumadas al déficit anterior, las erogaciones superan en 234 mil millones, es decir 18%, los ingresos corrientes. “Un presupuesto que carece de capacidad de maniobra para pagar su deuda atenta contra el mandato constitucional de un economía sostenible”, agregó.
Caram declaró que depender del endeudamiento para cubrir cargas fijas, para poder tapar un hoyo o construir una letrina y para pagar deuda vieja, violenta el mandato constitucional de velar por el buen manejo de las rentas públicas.
En segundo lugar, Caram señaló que se espera que el proyecto contenga una evaluación en lo referente a las exenciones, reducción de eliminaciones tributarias, impuesto a la propiedad, entre otros.
Advirtió sobre las omisiones y los efectos adversos que lo propuesto pudieran tener, particularmente con relación a la elusión tributaria, ya que el mantenimiento de los impuestos a operaciones bancarias y de la tasa del 18 % al Itebis mantendrán o aumentarán los niveles de informalidad de la economía; ya de por sí más informal que formal.
“Con una informalidad superior al 50 %, con vocación a aumentar en base a lo anunciado, la presión tributaria nunca podrá alcanzar las aspiraciones expuestas, arriesgando todos los intentos de racionalización tributaria, fiscal y económica”, manifestó Caram respeto a la propuesta de reforma fiscal.