El exgobernador del Banco Central, Guillermo Caram, consideró que el Gobierno no puede exhibir como logros los servicios de educación, salud, la reducción de la pobreza, incremento del empleo o mejorías en el aparato productivo nacional, porque esos sectores registran pocos avances.
Al hacer la observación destacó que con relación a la educación, a pesar de la inversión del 4% del presupuesto nacional en ese renglón, ha quedado demostrado que más escuelas no garantizan una mejor educación.
Con relación a los servicios de salud, destacó que no se puede hablar de logros cuando todavía persisten las precariedades en los hospitales públicos, no se ha iniciado la atención primaria, y en los servicios privados se mantiene la queja de los pacientes por la baja cobertura de las Aseguradores de Riesgos de Salud (ARS).
Caram expresó que mientras el Gobierno promueve que en los seis años de gestión consecutiva del presidente Danilo Medina aumentó el empleo, “la tasa de desocupación está igual que como Balaguer la dejó hace 22 años. Habrá más botellas, pero los empleos formales privados disminuyen. Solo hay más informales, de baja calidad, al no cotizar Seguridad Social”.
En ese mismo orden se preguntó cómo puede ser robusta una economía sustentada en un endeudamiento que crece tres veces más rápido que el PBI.
Sobre la reducción de la pobreza, consideró que las cifras que el Gobieno muestra no son más que un espejismo que esconde los subsidios que perpetúan la pobreza.
Sectores productivos. En cuanto a los avances que el Gobierno dice que ha tenido el sector agropecuario, Caram dijo que no se puede hablar de un “gran renacer agrícola” cuando la agropecuaria constituye 5.6% del PBI, “igualito que cuando Danilo comenzó en 2012 y la mitad de como la dejó Balaguer en 1996”.
Caram, dirigente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), cuestionó también que se exalten los avances de la producción nacional, mientras las importaciones crecen tres veces más rápido que el PIB “y los productores se quejan de obstáculos como intereses, impuestos, precios energía y combustibles”.
“Cómo es posible que hable de una República Dominicana más competitiva” cuando el Foro Económico Mundial informa que empeoramos 14 lugares desde 2016 a la fecha, encontrándonos dentro del cuartil menos competitivo del mundo”, refirió.