Rueda de prensa ofrecida por el economista y ex-gobernador del Banco Centra. Guillermo Caram. Foto/ Odalis Mejía 16/07/2019
El vicepresidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Guillermo Caram, exhortó ayer al liderazgo político nacional, a que aproveche el marco de la concertación con el presidente Luis Abinader para pactar una reforma fiscal, de acuerdo con el mandato del artículo 36 de la Ley 1-12 sobre reforma contemplada dentro de los pactos nacionales.
Desde su óptica el tema fiscal, gastos y recaudaciones, constituyen la piedra angular en que debe sustentarse un buen desempeño económico.
“En nuestro caso pasa a ser un nudo gordiano que debe ser profunda y urgentemente desatado mediante la reforma fiscal pactada que manda la ley”, precisó.
Caram entiende que tal iniciativa debe abordarse en el marco del abanico de concertación abierto por el presidente Abinader.
El exgobernador del Banco Central recordó que la ley que se promulgó en 2012, daba un plazo de 3 años para implementar dicho mandato, por lo que hay un atraso de 5 años para su implementación.
En tal sentido, precisa que por la detonación de la crisis sanitaria y económica en que se encuentra el país y por el empeño en institucionalizar la nación que consiste en someterse al imperio de la Constitución y las leyes; resulta impostergable pactar la reforma.
Según el dirigente reformista y exgobernador del Banco Central, la reforma contribuiría a reducir los riesgos derivados del endeudamiento o emisiones monetarias, devaluatorias e inflacionarias. Simplificaría el sistema de tributación para combatir evasión, contrabandos y discriminaciones tributarias.
A su entender, favorecerá la reducción para reorientar y mejorar la calidad del gasto que debe contemplar: reducción, no sustitución, de la hipertrofia burocrática; sometiéndose a la reorganización del Estado prevista en la Ley 257-12 y respetando las previsiones sobre carrera administrativa y personal prevista en la Ley 41-08.
Revisión de los regímenes de subsidios para que la asistencia estatal no inhiba el emprendimiento productivo, se dirija a sectores genuinamente necesitados e impida corruptelas en su administración.