Cardenal aboga por seguridad social ya

Cardenal aboga por seguridad social ya

POR FIOR GIL
El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez dijo ayer que el pueblo tiene derecho a disfrutar de seguridad social y consideró urgente la aplicación de la ley 87-01 que creó el Sistema Dominicano de Seguridad Social. 

La seguridad social, dijo López Rodríguez, como la tienen todos los países civilizados, es una imperiosa necesidad para los dominicanos, pero que su ampliación no ha prosperado porque en el país todo lo complican.

«Entiendo que lo que es la seguridad social es una necesidad  en este país, como la tienen todos los países civilizados del mundo. Pero somos complicados y somos difíciles para todo», dijo.

López Rodríguez, entrevistado al concluir una misa con motivo del Día Nacional de la Juventud, resaltó la necesidad de garantizar «a todos los sectores de la ciudadanía dominicana una auténtica seguridad social».

Dijo que algunos sectores considera que el sistema de seguridad social no ha prosperado porque su aplicación se comenzó por la  parte más  difícil, es decir en donde no había suficientes instalaciones sanitarias ni equipos, pero estimó que eso carece de importancia.

“Lo que importa es que la ley está votada y hay que salvarla porque es una necesidad imperiosa y urgente para todo el país», dijo.

López Rodríguez dijo que a pesar de que la Iglesia no ha sido convocada para mediar entre las partes, si se lo solicitan estaría en disposición de mediar.

La Ley tiene pendiente la aplicación el Seguro Familiar de Salud (SFS).

ATENCIÓN A LA LINCOLN

En otro orden el cardenal López Rodríguez pidió a las autoridades que pongan atención al “fenómeno” de utilizar la avenida Abrahám Lincoln como zona de expansión y centro de diversión por grupos de jóvenes.

Dijo que los actos de exhibicionismo reñidos con la buena conducta y la moral se pueden atribuir a un desajuste familiar y carencia de educación. «No se puede explicar más que de esa manera y ojalá que eso no se continué multiplicándose. Pero yo quisiera que se le pusieran atención no solamente a ese hecho sino al fenómeno Abrahám Lincoln. Hay efectivamente mucha violencia, mucho descontrol, desenfreno, que no es propio de una sociedad civilizada, en tener una juventud en este plano,  vulgarmente bebiendo, con exhibicionismos y todo tipo de barbaridades», expresó.

Considero como un abuso el hecho de tomar una vía pública, ocuparla con multitudes en detrimento de los moradores y de los usuarios.

«Todas las vías son publicas. Nadie tiene derecho, aunque sea una multitud, a ocuparlas. Por consiguiente las autoridades tienen la obligación de mantener la Abrahám Lincoln franca y despejada, que la gente pueda circular por ahí, aparte de eso también tenemos quejas porque hay que tomar en consideración los vecinos que noche por noche están en zozobra, no pueden descansar y son gente que trabajan, que están perjudicados, porque unos cuantos manganzones están hasta medianoche haciendo lo que le parece». enfatizó el cardenal.

Dijo que la inmensa de la mayoría de la juventud no en esas actividad, sino que son muchachos que estudian en liceos y en escuelas públicas y en las parroquias.

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