El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez consideró anoche “supergrave” al problema haitiano y descartó que una solución sean dos campamentos de refugiados en la República Dominicana, sino una inversión masiva de dinero en todo su territorio.

Advirtió que el problema haitiano sobrepasa la capacidad dominicana y que Estados Unidos, Canadá y Francia deben ocuparse de la inversión de recursos en Haití.

«Hemos aceptado, con la población (haitiana) permanente que tenemos, una cuota muy por encima de nuestras posibilidades, contando además con la infinidad de problemas que tiene este país con sus nacionales,» precisó.

El Arzobispo de Santo Domingo habló con los periodistas luego de inaugurar una sala de cirugía bariátrica, contra la obesidad, en el Centro de Diagnóstico, Medicina Avanzada Laboratorio y Telemedicina (CEDIMAT).

Consideró como injusto el planteamiento de esas tres naciones, de que se permita en la República Dominicana la instalación de centros de refugiados.

El cardenal López Rodríguez estimó que eso es inexplicable y se preguntó que cómo es que se puede simplificar tanto las cosas tan fuera de lo que debe ser.

Expresó que la única solución está en que las grandes naciones son las que deben proteger a los haitianos y que no conviertan estas dos naciones en dos realidades dignas de explotación.

En el acto de presentación del proyecto médico dirigido por el doctor Luis Betánces se informó que en el centro se han operado 41 pacientes con gran éxito, debido a la calidad del equipo profesional.

La obesidad es considerada la epidemia del siglo XXI, así como se considera la segunda causa de muerte prevenible después del cigarrillo, lo que indujo a CEDIMAT asumir el programa de cirugía de tratamiento quirúrgico contra la obesidad.