Cardenal dice hay poder detrás    

Cardenal dice hay poder detrás    

POR  ELIAS RUIZ MATUK
El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez dijo ayer que el negocio del narcotráfico no prosperaría en el país “si no hay personas que tienen, de alguna forma, participaciones en el poder”. Por esa razón, monseñor López Rodríguez, también arzobispo de Santo Domingo,  instó a las autoridades antinarcóticas a identificar a esos sectores “sin miedo alguno y sea quien sea”.

“Hay que estar atentos a ver quiénes son los que se están envolviendo en estas cosas y sin miedo alguno que se actúe, sea quien sea.  Aquí lo que importa es la integridad de la nación”, sostuvo el dignatario al oficiar una misa por un nuevo aniversario de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD).

La actividad estuvo encabezada por el presidente de la DNCD, vicealmirante Iván Peña Castillo, así como por el jefe de la Fuerza Aérea Dominicana (FAD), mayor general Nelson Marmolejos Acosta y por los directores del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI) y el Departamento de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (J-2), mayores generales Luis Damián Castro Cruz y Rafael Radhamés Ramírez Ferreiras.

Monseñor López Rodríguez manifestó que lo que hace falta es la lucha contra el narcotráfico, en lo que dijo están empeñadas las autoridades.  Consideró ardua y difícil esa labor, pero la cree necesaria por entender que  es en beneficio de la humanidad y especialmente de la República Dominicana.

Afirmó que hay personas de buena voluntad que ayudan a otras que han caído en el negocio de las drogas, “pero lo que se está moviendo está muy por encima de lo que se puede hacer”.

Exhortó  a quienes están al frente de la DNCD  a  “que no bajen la guardia” y que continúen atentos a los desafíos de la realidad del narcotráfico, que admitió no es exclusivamente del país.

A juicio del prelado, en el continente americano, Europa, Asia se da la impresión que las fuerzas del mal están aunadas en contra de los seres humanos.

Rechazó “totalmente y de plano” la propuesta de que las drogas sean legalizadas, con lo que dijo es probable que se pueda controlar el mercado,  pero se preguntó  “¿A qué precio lo vamos a conseguir?”.

Sobre la implicación de sectores de poder en el narcotráfico, dijo que la DNCD debe luchar para que el país sea salvado de lo que denominó “maraña y calamidades en el que la humanidad está sometida”.

“Esta es la intención que ofrezco al Señor por ustedes (miembros de la DNCD).  Sé que se juegan hasta sus propias vidas, porque esta gente (los narcotraficantes) no consideran ni creen en nadie”, enfatizó.

Reiteró que el plan es luchar en contra del narcotráfico, “a menos que queramos, entonces, cruzarnos de brazos y dejar el país a su suerte”.

A la eucaristía asistieron, además, el asesor del Poder Ejecutivo en asuntos del narcotráfico, doctor Marino Vinicio Castillo; el representante de la Drugs Enforcement Administration (DEA), Elías López, así como los generales Freddy González Estrada y José Almonte Sánchez, quienes representaron al jefe del Ejército Nacional, mayor general José Ricardo Estrella Fernández.

También, el director del Centro de Información y Coordinación Conjunta (CICC) de la DNCD, general Carlos Lantigua; el jefe de Operaciones de la DNCD, coronel Jacobo Mateo Moquete y Leopoldo Díaz, director de Hogares Crea, entre otras personalidades.

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