El doctor Fulgencio Severino, jefe de cardiología del hospital Salvador B. Gautier, criticó ayer que el sistema de salud carezca de una política de prevención cardiovascular, a pesar de la alta mortalidad por infarto agudo del miocardio en el país.
De las 36121 muertes que el Ministerio de Salud registro en 2012, el 35 por ciento respondió a muertes por causas cardiovasculares, para un total de 12,657 muertes. La cardiopatía isquémica fue la principal causa de todas las muertes, y de las cardiovasculares, una de cada 6 muertes se produce por esta causa, seguida por los accidentes cerebrovasculares con uno de cada 10 muertes.
En tercer lugar los accidentes de tránsitos uno de cada 20 muertes.
Aseguró que en los últimos cinco años, desde el 2008 al 2012, periodo que el Ministerio ha publicado las causas de muertes, la cardiopatía isquémica ha aumentado en número de muertes, aunque se ha reducido en porcentaje ligeramente, al pasar de 16.8% en el 2008 a 15.5% en el 2012.
Esta reducción es producto del mejoramiento de los servicios y el acceso a tratamientos que una parte de la población tiene en centros privados de mayor competencia en el manejo de esta patología. La cardiopatía isquémica en su fase aguda tiene alta mortalidad, debido a que una arteria obstruye una arteria coronaria que si no se interviene, causa la muerte.