La tasa de hipertensión arterial en RD es de 34%, una de las más altas de la región, la frecuencia consumo de cigarrillos bajó, pero hay más sobrepeso y una alta obesidad.
Las enfermedades cardiovasculares se han convertido en la asesina número uno de la población adulta, los científicos consideran que la razón principal para que esto ocurra es la transición epidemiológica.
Esto significa que las sociedades han dejado de ser agrícolas para convertirse en ciudades industrializadas, y con ello, asumir todos los hábitos dañinos a la salud prevalentes en los países económicamente aventajados.
En análisis lo hace el doctor Cesar Herrera, director del Centro Cardiovascular CEDIMAT, quien dijo que el sedentarismo, la vida agitada asociada a dietas no saludables y al consumo de comida rápida; el estrés provocado por las demandas laborales a distancia y la precariedad económica; son responsable de esta situación.
Asimismo, la incorporación de costumbres particulares al llamado primer mundo, y la insuficiente educación pública hacia la medicina preventiva, son apenas algunas de las razones detrás de esta nueva epidemia de la modernidad que ha sustituido a las enfermedades infecto-contagiosas típicas de antaño por el infarto al miocardio y el derrame cerebral.
“El hecho de que nuestra región esté poblada por ciudadanos predominantemente jóvenes hace que esta situación adquiera un matiz de gravedad dado su impacto social en miras al futuro”, dijo el reputado profesional.
Asegura que República Dominicana ha avanzado en materia de atención médica cardiovascular, sin embargo, todavía queda mucho por lograr.
Riesgos prevenibles
Herrera se refiere a que existen amplias oportunidades de trabajo en materia cardiovascular y parte de los llamados factores de riesgo prevenibles, que son aquellas condiciones que predisponen a las enfermedades cardíacas y que pueden evitarse.
La tasa de hipertensión es de 34%, una de las más altas de la región, y aunque la frecuencia del consumo de cigarrillos ha disminuido, el sobrepeso y la obesidad van en aumento, y con ellas la diabetes.
Mujeres y jóvenes
Pero la historia de los factores de riesgo no se detiene; hoy día se sabe que hay nuevos riegos que afectan a la población sobre todo a mujeres y jóvenes como son el uso de sustancias estimulantes, la hooka, los esteroides, vaping, y el embarazo con preeclampsia, explica.
Determinantes sociales
Los llamados determinantes sociales de salud cada vez más se reconocen como factores perjudiciales no biológicos, incluyendo el estrés ya mencionado, el acceso limitado a la atención de salud, la inestabilidad marital u hogareña, entre otros.
Otros problemas y la red de infartos
Aunque las cifras estadísticas no son del todo completas, se sabe que además del infarto al miocardio, el Accidente Cerebrovascular (derrame cerebral) y la disección aórtica (rotura de la arteria principal del cuerpo) son importantes causas adicionales de muerte en el país.
El país tiene la necesidad
conformar una red de tratamiento, que se estructure un mecanismo a nivel nacional que permita el abordaje urgente a esta letal condición en el tiempo requerido. Se trata de un plan que beneficie a todos los dominicanos independientemente de ingreso o cobertura de seguro.
Voluntad política
Solo se necesita voluntad política y la incorporación de todos los envueltos en la salud cardiovascular, incluyendo autoridades de salud pública, las aseguradoras, las sociedades profesionales y el Servicio Nacional de Salud (SNS).
Antecedentes
Estas iniciativas han sido implementadas exitosamente en múltiples naciones de menor recursos que la República Dominicana.
“Nos consta porque durante años recientes participamos y dirigimos la iniciativa global contra el infarto en países de bajo y mediano ingreso estructurada y coordinada por el Colegio Norteamericano de Cardiología”, Insiste que los resultados publicados muestran el importante rol que juega la implementación de estos proyectos en la mejoría de la atención del paciente infartado y su sobrevida.
Más educación
Es necesario consolidar la educación en el campo cardiovascular tanto hacia la población general y los pacientes, como a los médicos sean estos especialistas o no, dice Herrera.
El ciudadano dominicano debe saber cuáles acciones son las apropiadas a fin de mejorar su estilo de vida; los síntomas preocupantes por los cuales buscar ayuda profesional; entender aspectos relevantes a la dieta en el contexto del país; cuando buscar apoyo del cardiólogo antes de iniciar un programa de ejercicios, etc.
Mejor entrenamiento
Los médicos de las emergencias, los de atención primaria y los técnicos del 911 deben recibir entrenamiento continuo en aspectos de la enfermedad cardiaca grave como la identificación electrocardiográfica temprana del infarto al miocardio. También, al manejo de las arritmias potencialmente letales, entre otros, analiza Herrera.
Los oncólogos
Los oncólogos, que a la fecha han mostrado receptividad y deberán continuar estableciendo nexos con los cardiólogos ya que sus pacientes comparten condiciones asociadas al cáncer razón por la que hace más de cinco años lanzaron el primer servicio de cardio-oncólogía en el país, dijo el profesional. Igual los obstetras quienes entienden la complejidad de la enfermedad cardíaca en las embarazadas