La escasez de gas licuado de petróleo (GLP)  continuaba ayer, desabastecimiento que afectaba el servicio de transporte de pasajeros, la mayoría de los cuales se moviliza en  carros públicos que utilizan ese combustible.

La situación afectaba igualmente a los hogares, que usan gas para cocinar.

Durante un recorrido se estableció que varias envasadoras  mantenían cerradas sus puertas por falta del carburante.

“Yo he recorrido varias bombas y no hay gas. Fui a la avenida Isabel Aguiar, a varias bombas, y ahora estoy aquí, y tampoco hay. No he podido trabajar, no encuentro gas por ningún lado”, dijo Juan Eladio Acosta, taxista, entrevistado frente a la envasadora Lusergas, S.A., en la avenida George Washington.

Asimismo,  Francisco Alberto,  sub encargado de la envasadora  Óptimo Gas, ubicada en la calle Rafael Augusto Sánchez,  en el sector Evaristo Morales, dijo que esa surtidora  se quedó sin GLP desde las 9:00 de la mañana de ayer, pero  que el camión que la reabastece suele arribar a las 3:00 de la tarde, de ayer, a la Refinaria Dominicana de Petróleo, por lo que tendrá que seguir cerrada hasta nuevo aviso.

La escasez es atribuida a  retrasos en la importación del combustible por las empresas Coastal Dominicana y Mundo Gas, que distribuyen el carburante a la mayoría de las envasadoras.

Durante el recorrido sólo una envasadora tenía el carburante, Tropigas,  localizada en la avenida Roberto Pastoriza, donde hacían filas  una gran cantidad de choferes de vehículos públicos y privados y amas de casas.  

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Principales envasadoras

Al mediodía de ayer Mundo Gas permanecía con sus operaciones paralizadas, y Coastal esperaba aún  un buque procedente de Venezuela, pero situaciones climáticas en Maracaibo y otras zonas de  ese país han impedido que zarpe desde el puerto de San José, según Ingrid Herrera, ejecutiva de la empresa.