La embajada y la Casa de Italia dan un ejemplo valioso de exposición dominicana e intercambio internacional

Iris Pérez, artista directora de la Escuela Nacional de Artes Visuales, fue la curadora y expresó: “Inés Tolentino, Miguel Ramírez, Charo Oquet, Johnny Bonnelly, Thelma Leonor Espinal, Iris Pérez Romero, Raúl Morilla y Orlando Menicucci son los artistas que han aceptado ser parte de este importante proyecto expositivo en las categorías de dibujo, pintura, fotografía, escultura, video, performance e instalaciones artísticas.”

Ciertamente, es un proyecto importante, empezando por su nombre, Caribe en Residencia I, que ha culminado en una muestra estupenda, desde la selección de los expositores hasta la ubicación de sus obras.

La Casa de Italia había celebrado actividades y exposiciones durante varios años, pero esmeradamente renovada, apadrinada por la embajada de Italia y su embajador, se ha encaminado brillantemente por la creación visual. Ahora, expuso a ocho artistas muy reconocidos, magistrales o en el alba de la maestría.

Una museografía inteligente ha sabido disponer, en dos plantas, cuatro salones, espacios adyacentes y jardín, obras bidimensionales y tridimensionales, bastante disímiles en tamaños, materiales y técnicas, pero contemporáneas y estéticamente emparentadas, recientes y/o realizadas para esta muestra.

También nos parece muy atinado que varias obras representen a cada expositor, sin un orden alfabético ni jerárquico, así mismo para las categorías. Caribe en Residencia I es un conjunto hermanado por el talento, que recorremos con alegría y curiosidad. ¡Agregaríamos que corresponde al temperamento de su curadora Iris Pérez!

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Los Artistas

Johnny Bonnelly es el gran maestro de la escultura en metal, que proyecta su constructivismo contemporáneo, horizontal, vertical, y/o floreciente, pero también domina otros materiales como lo vemos aquí. Nos regocija volver a disfrutar piezas exquisitas, más que memorables, inolvidables.

Thelma Leonor, destacada gestora cultural, domina todas las dimensiones, y cuánto nos place ver su barroquismo abstracto, la calidad y la energía de una temática y ejecución variada, el despliegue de sus cuencos y construcción cerámicos, sin que falten nunca los acentos del color.

Orlando Menicucci ha mantenido siempre un desarrollo muy personal, dialogando de la figuración a la abstracción, matizando la luminosidad, cultivando un suave neo-expresionismo, más evocador que descriptivo, urbano y ambiental, demostrando cuán visual puede ser la poesía.

Raúl Morilla es el dueño indiscutible de la instalación, ahora dialogando con el claroscuro y superficies textiles, cultivando la emoción en una habitación misteriosa. También ha querido sembrar el espacio… con esculturas que prolongan el cuerpo con igual “brillantez”, pero onírica.

Cuando miramos obras de Charo Oquet, no olvidamos cómo se aniquiló su Gran Premio de la Bienal, y aquí su instalación, ligera, multicolor y saltarina se vuelve memoria del drama. La secuencia de fotos Queer con el impacto estético del “transgénero”, son un reencuentro con la artista de excepción.

Iris Pérez se ha hecho cimera e inconfundible con sus obras en blanco y negro, y el dibujo a tinta. Ahora bien, supo variar la composición, las figuras, el manejo del espacio, y fortalecer el color hasta la pintura. Es hoy más audaz y probablemente su estancia en Corea le hizo redescubrirse.

Miguel Ramírez es un profesional del arte polifacético, que incluye permanentemente investigación, teoría y gestión. No le agradan formatos y técnicas convencionales… lo observamos en sus pinturas y en su increíble personaje, construido en heno, que alimenta nuestro encanto.

Inés Tolentino es una dibujante estelar, de la pureza del estilo a la intensidad del concepto omnipresente: hay aquí una apropiación histórica, casi sofisticada, sobre soporte contrastante… Las tres pinturas, académicamente impecables, poseen fuerza, convicción, mensaje, expresión comprometida.

Caribe en Residencia I es un éxito, susceptible de seducir tanto a los públicos dominicanos como a los turistas que transitan por la zona…Luego, se nos anuncia “Convergencias contemporáneas entre República Dominicana e Italia”. ¿Próximamente tendremos nosotros la dicha de recibir obras italianas?